Cardenales

El prefecto de la Secretaría Económica del Vaticano, George Pell, afirmó que resulta "peligroso, moralmente equivocado, el hecho de que un alto exponente de la Iglesia, un obispo, un sacerdote de la parroquia o un superior religioso estén 'contentos' del hecho de no interesarse mínimamente de cómo se utiliza el dinero de la Iglesia y que digan: 'de dinero no entendemos nada'", dado que esa actitud abre la puerta a los "sinvergüenzas e incompetentes". 

El prefecto para la Congregación de los Obispos y de la Pontificia Comisión para América Latina, Marc Ouellet, explicó los motivos por los cuales esta práctica es un camino para quien no puede recibir el sacramento de la Eucaristía. "La misericordia de Dios puede restablecer la comunión espiritual en las almas arrepentidas aún manteniendo un límite a la comunión sacramental, pues esa se adapta a la debilidad de los pecadores sin favorecer esta debilidad a expensas de la fidelidad de los otros miembros del pueblo de Dios", afirmó. 

El arzobispo de Bogotá, Rubén Salazar, aseguró que "las puertas del Iglesia nunca han estado cerradas para los divorciados, pero si el sacramento de la comunión". "No se puede decir que el papa Francisco dijo que los divorciados vueltos a casar pueden volver a comulgar. No queda excomulgado de la iglesia, sigue formando parte de la Iglesia, que lo considera un miembro de su comunidad, pero es la doctrina de siempre y ahí no hay ninguna innovación", aseveró. 

El arzobispo emérito de Washington, William Wakefield Baum, fue elevado a cardenal por el Papa Pablo VI en el Consistorio del 24 de mayo de 1976, junto a Benedicto XVI. Ambos participaron como electores en los dos cónclaves de 1978, que eligieron a Juan Pablo I y a Juan Pablo II, y posteriormente en el de 2005. Baum fue el obispo que más tiempo trabajo como cardenal de la Iglesia en Estados Unidos, con 39 años de servicio.  

El arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez, sostuvo que pidió a Dios por los periodistas Ángel Sastre, José Manuel López y Antonio Pampliega, desaparecidos en Alepo. "Les acompañamos, acompañamos a sus familias y al gremio de los periodistas", afirmó. 

Francisco destacó que Giacomo Biffi, que fue arzobispo de Bolonia entre 1984 y 2003, y elevado a cardenal en 1985 por San Juan Pablo II, sirvió "con alegría y sabiduría al Evangelio, y amó tenazmente la Iglesia".

El penitenciario mayor de la Iglesia, Mauro Piacenza, aseveró que "no hay nada más terrible para los cristianos que sufren en ciertas condiciones, que sentirse ignorados", dado que "ellos tienen necesidad de sentirse cuerpo en la Iglesia y saber que nosotros los tenemos en consideración".

Los integrantes de la Congregación del Vaticano para las Iglesias Orientales tienen como misión ponerse en contacto con las iglesias católicas de Oriente para promover su crecimiento, velar por sus derechos y mantener vivos e íntegros dentro de la Iglesia tanto su patrimonio litúrgico como su disciplina y espíritu.

"Si nosotros calláramos frente a algo así, nosotros seríamos corresponsables de esta grave injusticia hacia los niños, que han sido transformados de sujetos de derecho como cada persona humana, en objetos de deseo de las personas adultas. Hemos vuelto al paganismo, donde el niño no tenía ningún derecho. Era sólo un objeto 'a disposición de'", aseveró el arzobispo de Bolonia. 

El arzobispo de Milán pidió a la comunidad internacional que piense en establecer "al menos un corredor humanitario" para intentar así "dar alivio" a la ciudad siria de Alepo, una de las más castigadas por el conflicto en ese país. 

El cardenal y presidente para la Tutela de los menores presentó un informe para mostrar a Francisco las denuncias de abuso del oficio episcopal.

El presidente emérito del Pontificio Consejo para la Familia en el Vaticano precisó que "la admisión a la mesa eucarística de los divorciados vueltos a casar civilmente y de los convivientes comporta una separación entre misericordia y conversión, que no parece en sintonía con el Evangelio".

El arzobispo de San Pablo reflexionó con los fieles sobre la dimensión de la Eucaristía como pacto y alianza de la humanidad con Dios.

El arzobispo de Valencia calificó de "inaceptable" y "contrario al Evangelio" la pretensión de reducir la religión al ámbito estrictamente privado, dado que olvida paradójicamente la dimensión pública y social de la persona humana.

"¿Cómo es posible acusar de complot contra el Papa a aquellos que presentan lo que la Iglesia siempre ha enseñado y practicado sobre el matrimonio y la comunión? No estoy en contra del Papa, no he hablado nunca contra el Papa, siempre he concebido mi actividad como un apoyo al ministerio petrino", sostuvo. 

El prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos sostuvo que "no se trata de matar por matar, dado que no debe ser así nunca, pero hacen falta mecanismos de defensa". 

"La comunidad internacional debe hacer más para combatir el hambre,  la malnutrición y sus consecuencias: migración, disparidad de ingresos y criminalidad", sostuvieron el presidente saliente y el entrante de Caritas Internacional. 

"Más que nunca estamos llamados a compartir el Evangelio casa por casa, de persona en persona, de familia en familia, de comunicad en comunidad", sostuvo el presidente de la Congregación para los Obispos y de la Pontificia Comisión para América Latina. 

El arzobispo de Manila, que reemplaza al cardenal Maradiaga, se convierte en el primer presidente elegido de Caritas Internacional que procede de Asia.

El arzobispo de Santiago afirmó que "la familia de la Iglesia, la comunidad, es otro espacio para vivir el amor que el Señor nos regala".

El arzobispo de Valencia afirmó que al mirar y escuchar a Dios "tocándole con nuestras manos en su carne tangible de los pobres, enfermos, sufridos y marginados, con los que se identifica, podremos hallar la única esperanza que pueda dar plenitud de sentido a la vida". 

El arzobispo de Tegucigalpa lamentó que "una de las consecuencias este conflicto son los millones de desplazados y refugiados que ha provocado, los cuales quisieran vivir en su patria, pero están, en su gran mayoría en Líbano, en un país que les acoge con bondad, pero que no les permite trabajar y ni siquiera conducir un coche". 

El prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales invitó realizar una "comunión aún más profunda" entre las Iglesias, entre la caldea y siro-católica, que son mayoritarias, y las más pequeñas.

El arzobispo de Valencia sostuvo que el voto responsable "habría de encaminarse a hacer posible el rearme de la vida moral, a la superación de toda corrupción, a la recuperación y a afirmación defensa y promoción del valor inalienable de la persona". 

"Debemos darnos cuenta que es importante manifestar la fe en todos los ámbitos de la vida, no imponerla, pero no nos dejemos engañar. La fe católica no se quiere imponer, quiere libertad de expresión y de comunicación", aseguró el arzobispo de Lima. 

El arzobispo de Cracovia aseguró que "si queremos seguir siendo fieles al legado de Juan Pablo II, debemos andar con valentía el camino del amor de Dios y del prójimo, es decir, por el camino de la santidad". 

El arzobispo de Montevideo pidió estar atentos "porque la verdad no se puede decir a medias", frente a los dolores que suceden a otros hermanos nuestros. 

El arzobispo de Lima aseguró que el maltrato o la humillación permanente se solucionan con la actualización en la sociedad de los principios de la fe cristiana.

El actual arzobispo de Chicago, Blase Cupich, describió al cardenal George como "un hombre de paz, tenacidad y coraje" en el anuncio de su fallecimiento.

El penitenciario Mayor de la Iglesia explicó la estrategia que usan el demonio y el mundo contra la Iglesia.

"No se trata más que de una cuestión estrictamente administrativa en el contexto específico de la República Argentina", sostuvieron los lefevristas de la Fraternidad San Pío X. 

El arzobispo de Cracovia recordó que la misericordia se encuentra también en la guía que la Iglesia ofrece al mundo al exponer su Doctrina, incluso en materias que hoy en día son poco comprendidas por algunos sectores.

Amor, adulterio, pornografía, dolor, fecundidad… El cardenal Barbarin, arzobispo de Lyon, expone su opinión sobre todo en su último libro. 

El arzobispo sudafricano Wilfrid Napier criticó al cardenal alemán Walter Kasper, principal promotor de que se permita la comunión a los divorciados en nueva unión, y rechazó que a este se le pueda atribuir ser 'el teólogo del Papa'.

El arzobispo primado de México resaltó que "hay que salir al encuentro de las nuevas situaciones en la sociedad contemporánea donde ya no se oye hablar de Cristo". 

El arzobispo de Santiago aseveró que "las cruces las vemos en el dolor de la Iglesia, que sufre el embate y la persecución del demonio". 

Unos 45.000 fieles participaron de la XV edición del Vía Crucis de la Avenida de Mayo que fue presidido por el cardenal arzobispo de Buenos Aires, Mario Aurelio Poli.

El cardenal se ocupará de las universidades, institutos y escuelas superiores de estudios eclesiásticos o civiles que dependen de la Iglesia.

"La idea de que las conferencias episcopales pueden tomar decisiones doctrinales sobre el matrimonio y la familia al margen del Papa y un sínodo general es absolutamente anticatólica", aseveró el prefecto de la de la Congregación para la Doctrina de la Fe. 

El presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos aseguró a los obispos alemanes que la Iglesia no puede adaptarse a los tiempos de la manera en que lo hicieron los ‘Deutsche Christen’, la organización de cristianos luteranos alemanes para apoyar el nazismo.