Centroamérica

La Conferencia del Episcopado Dominicano, presidida por Diómedes Espinal De León, reiteró que las acciones preventivas dispuestas pretender ayudar a "la protección de la vida y la salud de la población", luego de dispensar a sus fieles de asistir a Misa, que será transmitida por los medios de comunicación. Los prelados precisaron que celebrarán la Eucaristía sin participación de los fieles. 

La Conferencia Episcopal de El Salvador declaró el 2020 como "Año Jubilar de los Mártires", al cumplirse 40 años del martirio de san Oscar Arnulfo Romero. "El martirio es el mayor testimonio de fe, porque reproduce fielmente a Cristo, dando su vida para que otros tengan vida en abundancia", indicaron los prelados.

El arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, ratificó que las actitudes de los obispos "son siempre de pastores, de anunciar el Evangelio". "Oramos por los que nos calumnian y que nos levantan falso testimonio", aseveró el prelado, al indicar que "los partidos políticos, las personalidades pasan y la Iglesia sigue adelante". 

Miles de fieles en todas las diócesis del país participaron de la octava edición de la caminata 'Un paso por mi familia' con el lema 'Iluminados por la Palabra'. El arzobispo de Santo Domingo, Francisco Ozoria, reiteró el compromiso de la Iglesia con la familia, que es un "santuario de vida", al presidir una Mis'. "Es lamentable que a veces encontramos personas que se profesan cristianos, que se profesan de la Iglesia Católica, pero que no están a favor de la vida, que apoyan el aborto o sus tres causales", sostuvo. 

La Arquidiócesis de Managua repudió el ataque contra la catedral local, perpetrado por "grupos violentos afines al gobierno" de Daniel Ortega, quienes agredieron al sacerdote Rodolfo López y a la religiosa Sor Arelys Guzmán y pidió a las autoridades que se "tome acciones inmediatas para que se respeten todos" los templos católicos. La Conferencia Episcopal de Nicaragua denunció los ataques padecidos en la catedral de Managua, y también repudió los sufridos en la iglesia de San Miguel Arcángel. 

La Conferencia Episcopal de República Dominicana calificaron de "nociva" que la llamada "política de género" sea incluida en el diseño curricular de la formación pre universitaria. "La política de género enmascara la ideología de género que desarraiga la naturaleza humana, ignora la biología, desconociendo conceptos científicos irrefutables. La enseñanza siempre debe estar basada en las ciencias y los valores y no en la percepción ideológica", aseveraron los prelados.

El arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, solicitó a la Policía que evite "más violencia" en Nicaragua. "La violencia genera más violencia y trae más desconfianza entre los ciudadanos. El diálogo es la única solución a los problemas en el país", indicó, frente a la crisis sociopolítica, durante una conferencia de prensa del Consejo Episcopal Latinoamericano, del que es segundo vicepresidente. 

El obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, confirmó que se irá temporalmente al Vaticano para colaborar con Francisco después de las celebraciones de Semana Santa. "A lo largo de estos meses recibí constantes amenazas de muerte y se lo dije al Papa, mi vida estuvo constantemente amenazada, pero nada de eso detuvo mi ministerio, ni para seguir con el Evangelio y seguir haciendo críticas constructivas", aseguró Baéz, tras indicar que incluso supo de un plan para asesinarlo por alerta de la Embajada de Estados Unidos en Nicaragua. 

La Conferencia Episcopal de Nicaragua afirmó que ya que hasta este momento no recibieron "ninguna correspondencia al respecto", comprenden que "no somos de ineludible necesidad para dichas negociaciones" entre el Gobierno y la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, frente a la crisis en el país. 

El párroco de la iglesia San Miguel Arcángel de Masaya, Edwin Román Calderón, fue detenido por media hora y agredido físicamente por policías, hecho que fue condenado por la Arquidiócesis de Managua. "Reclamé y empecé a tomarles fotos, les dije que llamaría a los medios de comunicación; entonces intentaron quitarme el celular y me golpearon en el rostro. Seguiré junto al pueblo sufrido de Nicaragua. A mí nadie me va a callar, aunque me digan que me van a dar un balazo en la cabeza", sostuvo Calderón.

El obispo de Roma precisó que a todos les "gusta decir que son el futuro", pero los jóvenes son "el presente", en el Campo San Juan Pablo II - Metro Park. "Jesús no es una moda pasajera, es amor concreto, de hoy, cercano, real; es la solidaridad y la fraternidad frente a tanta mirada paralizada y paralizante por los miedos y la exclusión, la especulación y la manipulación", aseguró el Pontífice. 

El arzobispo de Panamá, Domingo Ulloa, precisó a los miles de jóvenes reunidos en el Campo Santa María la Antigua que "ser santo es una realidad", y reiteró que "un santo defiende a los indefensos: al no nacido, pero también al nacido en miseria". "Este encuentro de ustedes jóvenes con Jesucristo debe llevarlos a la confrontación consigo mismos y con el adoctrinamiento del sistema de anti valores que impera sustentado en la búsqueda de una falsa felicidad", reflexionó. 

El Gobierno de Panamá afirmó que asistirán el presidente de Colombia, Iván Duque Márquez; el de Costa Rica, Carlos Alvarado Quesada; el de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; el de Guatemala, Jimmy Morales; el de Honduras, Juan Orlando Hernández; y el de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa.

Más de 4.000 jóvenes realizan un esfuerzo para poder participar de la Jornada Mundial de la Juventud de Panamá, acompañados por 10 obispos. La Conferencia Episcopal de Nicaragua estaba entre los organizadores del evento, pero sus prelados declinaron en julio pasado por su papel como intermediarios en el diálogo entre los ciudadanos y el gobierno de Daniel Ortega. "Algunos jóvenes nicaragüenses que van a la jornada hicieron sacrificios económicos extraordinarios para poder ir", precisó un periodista nicaragüense. 

El arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, decidió que se realice una jornada de oración y una Misa en la catedral, donde años anteriores concluía la procesión que comenzaba en el colegio Cristo Rey. Afirmó que tomó esa medida para "favorecer aún más el ambiente de oración y de reflexión de la comunidad eclesial arquidiocesana".

El obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, solicitó a los que integran el gobierno de Daniel Ortega que "no usen la violencia, no repriman, traten con respeto a la gente". Afirmó que la crisis que vive Nicaragua "sacó muchas mascaras" y es "cruel, podrida y criminal" y que "no podemos acostumbrarnos a eso". 

El arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, indicó que no es fácil el perdón "sobre todo para las familias de los heridos, muertos y prisioneros de esta crisis". "No es humano perdonar, es divino, tenemos que pedírselo al Señor", explicó. 

El vicario de la catedral de Managua, Mario Guevara, de 59 años, sufrió un atentado con ácido sulfúrico que le arrojó una mujer de nacionalidad rusa, que le dejó quemaduras en el cuello, brazos, mejilla y un ojo. "Él estaba terminando unas confesiones. Se detuvo a bendecir unos crucifijos y la mujer se le acercó y le tiró el ácido. Escuchamos cuando él pedía ayuda y se quejaba del dolor", sostuvo José Pineda, testigo del ataque.

El presidente de la Conferencia Episcopal de  Nicaragua, Leopoldo Brenes, reiteró que los obispos están "para servir". "En ningún momento queremos ocupar un poder temporal porque servimos para la Iglesia", precisó el arzobispo de Managua, al indicar que "no pretende tener una confrontación con el Gobierno".

Miles de ciudadanos participaron de la caminata 'Un paso por mi familia', encabezada por la Vicaría Episcopal Familia y Vida de la Arquidiócesis de Santo Domingo. El obispo auxiliar de Santo Domingo, Jesús Castro, pidió "no olvidarse de los niños por nacer en el país" dado que entre "todos los pobres, son los más pobres, porque ni siquiera tienen voz para defenderse", durante la Misa de cierre de la marcha.

Los manifestantes, que portaron carteles con frases 'A mis hijos los educo yo' o 'con mi familia no te metas', rechazaron la ideología de género incluida el documento educativo de Educación Integral de la Sexualidad. "No queremos que sigan corrompiendo a nuestros niños", denunció Julia Regina de Cardenal, presidente de la Fundación Sí a la Vida.

El obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, advirtió sobre las murmuraciones inútiles o en ocasiones "cortinas de humo que a veces lanza el poder para que no prestemos atención a los verdaderos problemas". "El poder es un riesgo y cuando se ejerce con autoritarismo es una desgracia para quien lo tiene", indicó Báez.

El arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, precisó que "es necesario promover una cultura de paz, en donde podamos respetarnos todos", y lamentó que "haya confrontaciones entre hermanos, familias divididas polarizadas" por esta situación. 

El obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, aseguró que "las amenazas, agresiones verbales, injurias y espionaje contra la Iglesia Católica de Nicaragua no son parte de una persecución política sino 'religiosa'", luego de la agresión verbal que padeció el prelado de Matagalpa, Rolando Álvarez por formar parte de una comisión de mediación de la Conferencia Episcopal de Nicaragua en el diálogo nacional. 

Los manifestantes en la Plaza de la Constitución rechazaron las iniciativas en contra de la vida del niño por nacer y la familia natural, y apoyaron el proyecto de ley 5272 que las defiende. El administrador de Santiago de Guatemala, Raúl Martínez, que encabezó la movilización exhortó a "defender la vida desde el primer instante de la concepción". 

El presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, Leopoldo Brenes, indicó que esta situación "trae tensiones para las familias" por lo que solicitó que "nos respetemos y que las protestas que se puedan hacer sean siempre dentro de la línea cívica, pacífica, como en la práctica se han hecho". 

El obispo de Ciudad Quesada, José Manuel Garita, pedir al Estado que no confunda "el orden natural del matrimonio y familia". "Basta ya de querer discriminarnos por tener un discurso que desde la religión ilumina la realidad nacional. El equilibro es urgente en una discusión donde el matrimonio formado por el hombre y la mujer, también tiene un bello rostro que presentar", precisó.

El cardenal Leopoldo Brenes destacó la muestra de apoyo de los manifestantes que asistieron a la marcha, de la que no participó la Conferencia Episcopal, y agradeció especialmente "a los laicos de nuestra Iglesia católica, a nuestros fieles, como también a muchos miembros de otras iglesias hermanas que se unieron a esa peregrinación".

El párroco en Monimbó, al sur de Masaya, Augusto Gutierrez, precisó que la situación que se vive es "un genocidio". "Nos amenazaron de muerte porque nos dicen que somos cabecillas de esta situación, pero hemos dado la cara porque es injusto lo que el gobierno está haciendo", aseveró. 

El nuncio en Nicaragua, Stanislaw Sommertag, sostuvo que "llorando por todos los muertos y rezando por sus familias, hago, con todas mis fuerzas humanas y espirituales, un llamado a las conciencias de todos, para lograr una tregua". 

La Conferencia Episcopal de Nicaragua precisó que será un "acto de desagravio por las profanaciones realizadas estos últimos meses contra Dios". "Estos momentos de reparación e intercesión son un llamado a la conversión para todos", reflexionaron los prelados. 

El asistente del obispo de Estelí, Abelardo Mata, Roberto Petray, precisó que el prelado "fue interceptado por paramilitares que rafaguearon su carro, le quebraron los vidrios y quisieron quemarlo", pero logró refugiarse en la vivienda de un familiar. 

Las agresiones contra cardenal Leopoldo Brenes, el nuncio Waldemar Somertag, y otros obispos, entre ellos el obispo auxiliar Silvio Báez, aunque de poca gravedad, evidenciaron el clima de violencia que se vive en el país. Brenes aseveró que nunca "había visto en Nicaragua situaciones así, verdaderamente es triste". "Me arrebataron las insignias episcopales y fui agredido verbalmente", denunció Báez. 

El cardenal Leopoldo Brenes condenó "la agresión al equipo periodístico de la Diócesis de Matagalpa quienes se disponían a dar cobertura de la labor de los sacerdotes de la Diócesis de Estelí". Denunció que en el templo parroquial La Candelaria, en el municipio de la Trinidad, miembros de la policía nacional y grupos paramilitares, causaron temor a sacerdotes y fieles que estaban en su interior.

El arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, aseveró que hombres armados disparan a civiles que caminan "por las calles sin ninguna arma o alguien que está detrás de una barricada". Reiteró que la Iglesia insistirá en el Diálogo Nacional.  

La Arquidiócesis de Managua indicó que el cardenal Leopoldo Brenes, acompañado del prelado Rolando Álvarez, ya se encuentran en el Vaticano "para cumplir su agenda de trabajo". 

El cardenal Leopoldo Brenes, el nuncio Stanislaw Waldemar Sommertag, el obispo auxiliar de Managua, Silvio Baéz, se trasladaron a Monimbó en Masaya, donde paramilitares afines a Daniel Ortega perpetraron una matanza que dejó 6 muertos y decenas de heridos durante protestas civiles. Miles de personas recibieron a los obispos, los rodearon y marcharon con ellos y el Santísimo Sacramento por el barrio.

El cardenal Leopoldo Brenes afirmó que entregaron al mandatario Daniel Ortega "la propuesta que recoge el sentimiento de muchos sectores de la sociedad nicaragüense y expresa el anhelo de la misma mayoría de la población", en un intento por restablecer el diálogo nacional.

El presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, Leopoldo Brenes, pidió la conformación de una comisión mixta para alcanzar acuerdos, que sea conformada por tres delegados del Gobierno de Daniel Ortega y tres en representación de universitarios, sociedad civil y empresarios, para que se pueda reactivar el diálogo.

Los prelados precisaron las amenazas de muerte y descrédito contra obispos y sacerdotes, se dirigieron de modo particular hacia Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua. "Los obispos nos estamos jugando literalmente la vida en este diálogo", afirmó Báez.