El Vaticano precisa que la defensa del sigilo es «un necesario testimonio, un martirio, vinculada con la unicidad y la universalidad salvífica de Cristo en la Iglesia»
El Penitenciario Mayor de la Curia, Mario Piacenza, precisó que "en la celebración del sacramento de la Reconciliación se encierra la esencia misma del cristianismo y de la Iglesia". "La defensa del secreto sacramental y la santidad de la confesión no se podrán constituir nunca en alguna forma de connivencia con el mal, al contrario, representan el único antídoto verdadero contra el mal que amenaza al hombre y al mundo", aseguró.