"Hay muchos que dicen: ¿Por qué los cristianos no dejan Irak y simplemente se marchan a otro país? A esta pregunta respondemos: ¿Por qué tenemos que dejar nuestro país?, ¿qué hemos hecho?", sostuvo la religiosa irakí de las Hermanas Dominicas de Santa Catalina de Siena.
El cardenal Fernando Filoni, prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, está visitando estos días Irak, enviado por el Papa Francisco para hacer sentir su cercanía al pueblo irakí, especialmente a los refugiados.
La mayoría de los integrantes vivían en la llanura de Nínive, antes de que los extremistas la invadieran hace siete meses. Su propósito es recuperar las áreas invadidas por los extremistas.
El arzobispo católico caldeo de Erbil, Bashar Matti Warda, habló a los miembros del Sínodo General de la Iglesia Anglicana sobre la agónica situación de los cristianos en Irak. Anteriormente había pronunciado un discurso ante el Parlamento británico, en el que pidiú una acción militar de tierra.
El arzobispo católico caldeo de Erbil, en el kurdistán irakí, Bashar Warda, "imploró" ayer, en el Parlamento de Londres, a los gobiernos occidentales que envíen tropas de campo como única manera de derrotar a los yihadistas y permitir a los cristianos que regresen a sus hogares.
Reunió 1300 manuscritos fechados entre los siglos XIV y XIX, que permitirá tener un amplio archivo del pasado del país del que los cristianos son parte desde hace unos dos mil años.
Citan el artículo 125 de la Constitución de Irak, actualmente en vigor, que garantiza la protección y la regulación legal de los “derechos administrativos, políticos, culturales y educativos de diferentes nacionalidades”.
Agradecieron la ayuda brindada y recuerdan que "Dios nació en un establo tan humilde como estas tiendas".
Detrás del convenio, el objetivo común de luchar contra el Estado Islámico.
El Estado Islámico impuso un toque de queda y luego una intimidación para que miembros tribales abandonen sus hogares.