El obispo de Limburgo, Georg Bätzing, de 58 años, fue elegido como nuevo presidente de la Conferencia Episcopal de Alemania por un período de 6 años. Bätzing ocupaba hasta ahora el cargo de presidente de la Subcomisión para el Diálogo Interreligioso y era miembro de la 'Comisión Iglesia Universal'.
Católicos de todo el mundo en Alemania se movilizaron con una oración silenciosa como forma de protesta contra la Conferencia Episcopal de Alemania, presidida por el cardenal Reinhard Marx, y su polémico "proceso sinodal". "Teniendo en cuenta las convicciones ideológicas y las declaraciones públicas de muchos obispos alemanes, no tenemos dudas: el resultado del camino sinodal solo puede ser el establecimiento de una iglesia separada de Roma", indicó el grupo organizador de la concentración 'Acies ordinata'.
El arzobispo estadounidense de Denver, Samuel Aquila, precisó que "es decepcionante que los obispos alemanes hayan decidido seguir adelante con sus planes, pese a la intervención de Francisco y una carta del cardenal y prefecto de la Congregación para los Obispos, Marc Ouellet, que dijo que la propuesta alemana 'no es eclesiológicamente válida'". "Fácilmente se puede observar en la historia que cambiar la enseñanza para estar al día con la moralidad moderna no llena iglesias", aseveró el prelado.
El periodista de National Catholic Register Edward Pentin confirmó con el vocero vaticano Alessandro Gisotti que varios obispos de Alemania y algunos expertos participaron de una reunión privada para tratar el Sínodo de la Amazonía, el martes 25 de junio. Precisó que Gisotti indicó que la reunión fue "un encuentro de estudio" de la Red Eclesial Panamazónica. "Es una reunión de estudio, no es para el público. Habrá otras más antes del Sínodo", sostuvo el portavoz, al precisar que no podía dar detalles de los participantes.
El arzobispo de Colonia, Rainer Woelki, argumentó que "como Iglesia Católica, también tenemos que señalar que somos parte integrante de la Iglesia universal".
El Pontífice sostuvo que "aprecia el esfuerzo ecuménico de los obispos alemanes" y les pidió encontrar "en espíritu de comunión eclesial, un resultado posiblemente unánime" sobre el permiso que pretendía aprobar la Conferencia Episcopal de Alemania para que los protestantes casados con católicos reciban la Comunión, que fue rechazada por el cardenal Rainer Woelki junto a 6 obispos.
El presidente de la Conferencia Episcopal de Alemania, Reinhard Marx, consideró que "si la cruz es entendida como un símbolo cultural, es que no se ha entendido, es más bien una expropiación por parte del Estado de un símbolo de la Fe". Actualmente Marx se encuentra en Roma tras ser citado por Francisco al proponer dar la Eucaristía a los protestantes casados con católicos.
La Conferencia Episcopal de Alemania confirmó que el cardenal Reinhard Marx fue convocado a Roma, por anunciar un proyecto en febrero pasado que pretende otorgar permiso a los protestantes casados con católicos para recibir la Comunión como una supuesta "hospitalidad eucarística".
El arzobispo de Colonia, Rainer Woelki, y los prelados Ludwig Schick, Konrad Zdarsa, Gregor Hanke, Stefan Oster, Rudolf Voderholzer y Wolfgang Ipolt, consultaron a la Congregación para la Doctrina de la Fe y al Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos si es lícito que el cardenal Marx apruebe dar la Eucaristía "bajo ciertas condiciones" a protestantes casados con católicos .
Un musulmán irakí de 34 años masacró con un fusil a un guardia de seguridad e hirió a cuatro personas antes de ser ultimado por la policía, en una discoteca en la ciudad alemana de Constanza. Dos días después, un islamista emiratí de 26 años mató con un cuchillo a una persona e hirió de gravedad a otras seis, en el interior de un supermercado en Hamburgo, y luego, según testigos, gritó "Alá es grande".
Los atacantes además quemaron el techo de la iglesia San Reinoldo, la más antigua del país, en la ciudad alemana de Dortmund, el 31 de diciembre pasado. "Un grupo de al menos cien jóvenes varones empezaron a lanzar cohetes contra una multitud de visitantes entre las que se hallaban familias con niños", indicó el diario local Ruhr Nachrichten.
La agencia Amaq, ligada a los yihadistas, difundió un video en el que el autor del atentado de Berlín donde fallecieron 12 personas y 48 quedaron heridas, Anis Amri, jura lealtad a la organización extremista que lidera Abú Bakr al Baghdadi. "Llamo a mis hermanos en todas partes a que hagan la yihad en nombre de Dios, cada uno en función de sus capacidades", indicó el refugiado tunecino.
El ministro del interior de Alemania, Thomas De Maizière, afirmó que un refugiado islamista de 23 años fue detenido por ser el principal sospechoso de estrellar un camión en un mercado navideño. La Canciller de Alemania, Angela Merkel, afirmó que "si se trata de un refugiado, el hecho sería particularmente repugnante", y aseguró que van a garantizar el "total esclarecimiento" de los hechos.
El arzobispo de Berlín, Heiner Koch, exhortó a los manifestantes de la movilización, organizada por la Asociación Federal por el Derecho a la Vida, a evidenciar que "todo ser humano puede desarrollarse bien, desde el primer momento en el vientre materno hasta su último aliento".
La Conferencia Episcopal de Alemania, presidida por el cardenal Reinhard Marx, debió reconocer que nunca antes tan pocos sacerdotes se ordenaron en la Iglesia Católica de ese país. Sólo 96 nuevos estudiantes se registraron en 2015.
La pastora angliacana de la Iglesia Evangélica Libre de origen iraní, Mahin Mousapour, denunció que "los cristianos han empezado a esconder sus biblias y crucifijos y los mantienen en secreto para no atraer la ira de los musulmanes". La dirigente política de la Unión Demócrata Cristiana de Alemania, Erika Steinbach, consideró que son "crímenes de odio los horribles ataques" sobre los valores fundamentales y la Constitución del país.
Georg Gänswein criticó el trato a los católicos cuando deciden no pagar el impuesto que beneficia a la Iglesia en Alemania. "¿De qué manera la Iglesia en Alemania reacciona ante alguien que se va? Con la expulsión automática, la excomunión. Eso es excesivo, incomprensible. Se puede cuestionar el dogma, nadie está preocupado por eso, nadie es expulsado. ¿Es la falta de pago del impuesto a la Iglesia una ofensa más grande contra la fe que las violaciones a sus principios?", aseveró el arzobispo alemán.
La Conferencia Episcopal Alemana, presidida por el cardenal Reinhard Marx, reconoció que la Iglesia en ese país tiene cada vez menos católicos, sacerdotes que no se confiesan y un descenso general del número de bautismos y matrimonios. En 2015, Francisco, al recibir a los obispos alemanes, afirmó que "puede hablar verdaderamente de una erosión de la fe católica en Alemania".
Un joven al grito de "Alá es grande" atacó a cuchillazos a pasajeros, en la estación de trenes S-Bahn en Grafing, Munich. Los servicios de seguridad alemanes están en alerta y los ministros del país advirtieron sobre la posibilidad de un ataque extremista como los de Bruselas y París.
El presidente de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución, Hans-Georg Maassen, afirmó que "los servicios de inteligencia son conscientes de que el Estado Islámico planean realizar atentados en territorio alemán", por eso les preocupa "la existencia de numerosas mezquitas islamistas" en el país a las que también deben vigilar.
El sitio de la Conferencia Episcopal Alemana, presidida por el cardenal Marx, volvió a agredir a los fieles africanos en un artículo publicado, después de que Francisco, que actualmente está en África, afirmara hace unos días que la fe católica sufre un fuerte descenso en Alemania. Frente a ello, los prelados alemanes descalificaron con soberbia y racismo al cardenal y el prefecto de la Congregación para el Culto Divino, Robert Sarah, y los católicos del continente.
El presidente del Consejo Central de Musulmanes en Alemania, Ayman Mazyek, reconoció que con la llegada de refugiados hay un aumento de asistencia en las mezquitas de entre el 40 y 50 por ciento en la mayoría de los casos y que incluso llega a "doblarse el número de personas". Los expertos advierten que no puede hablarse propiamente de 'islamización de Alemania'.
La canciller alemana, Angela Merkel, ha concedido una entrevista en la que habla de su vida privada. Educada por su padre, pastor luterano, en una ética protestante, confiesa que "la fe en Dios me ayuda en la vida política". Ante el riesgo de islamización de Europa, Merkel indica que la mejor respuesta es tener "el valor de ser cristianos".
"Una sola persona, que había elegido la muerte para sí misma, arrastró a muchos otros. Nos faltan las palabras para este hecho", reconoció el presidente de Alemania, Joachim Gauck.
Los fieles católicos de Alemania ha puesto de manifiesto su profunda molestia por el decreto de la Conferencia Episcopal Alemana que priva de los sacramentos a aquellos que no paguen el “impuesto a la Iglesia”.
El año 2013 fue un año difícil para la Iglesia católica en Alemania. 178.805 personas se fueron de la Iglesia y rechazaron pagar el impuesto.