Desciende drásticamente el número de católicos en Alemania en 2013

El año 2013 fue un año difícil para la Iglesia católica en Alemania. 178.805 personas se fueron de la Iglesia y rechazaron pagar el impuesto.

Autor: VenL. / Fuente: Aleteia.

EL CARDENAL MARX LO CONSIDERA "DOLOROSO".

Múltiples razones explicarían este fenómeno: los recientes casos de abusos sexuales que afectan al clero, así como el escándalo en torno a los excesivos gastos del obispo de Limburgo, monseñor Franz-Peter Tebarz-van Elst, suspendido de su cargo por el Papa Francisco. Pero también, sin duda, una economía suplementaria simple en estos tiempos de crisis económica, tanto en Alemania como en el resto de Europa. Las estadísticas publicadas hace un tiempo por la Conferencia Episcopal de Alemania revelan, además, un descenso general de la práctica religiosa y sacramental entre los fieles. Resultados “dolorosos”, en palabras del presidente de la conferencia episcopal, el cardenal Reinhard Marx, que confirman una pérdida de confianza y de credibilidad. Radio Vaticano recoge la valoración de Brigitte, una traductora francesa residente en Alemania: “Están en primer lugar los abusos sexuales y los escándalos de pedofilia; esto ha dañado enormemente a la Iglesia”, reconoce. “Después, el año pasado, hubo un problema con el obispo de Limburgo, que construyó una casa diocesana, era un proyecto gigantesco y los costos eran muy elevados; la opinión pública se indignó por las revelaciones sobre el lujo del edificio”, añade. Más allá de los escándalos, hay que reconocer que esta disminución del número de personas que han pagado el impuesto puede explicarse también por razones económicas. “Es quizás un poco sorprendente decir que Alemania viva una situación económica a veces difícil, es así para millones de personas que sólo tienen mini-empleos que sólo les aportan 400 euros mensuales; también hay razones económicas, no hay que pasarlas por alto”, explica Brigitte. A ello se añade un problema de comprensión entre el Estado, los bancos y los contribuyentes el año pasado. “Antes, los bancos pagaban el impuesto al Estado; ahora lo pagan directamente a las Iglesias, explica Brigitte. Los bancos han escrito a sus clientes para prevenirles; algunos han creído que se trataba de un nuevo impuesto”. “Muchas personas en Alemania no entienden para qué sirve el impuesto de la Iglesia. Sin embargo, la Iglesia es muy activa, es uno de los mayores empleadores del país”, destaca Brigitte. “En general la Iglesia tiene mucho peso, es un actor escuchado y respetado en la sociedad, y hace un buen trabajo en el ámbito social”, indica. “Gestiona muchos hospitales, guarderías, residencias de ancianos, discapacitados o personas en dificultad…”, constata. “La Iglesia financia todos estos proyectos, no necesariamente al 100%, por supuesto, pero sí realiza una buena contribución a estos proyectos, y eso no todo el mundo lo sabe… La Iglesia católica también es activa en la ayuda al desarrollo, en las organizaciones solidarias”, añade.

Brigitte señaló que “se constata también un déficit de formación. Hay cursos de religión en la escuela, pero eso que se llamaba antes catequesis, yo realmente no veo qué lugar tiene ahora… mucha gente no sabe lo que quiere decir 'Pascua'. “La Iglesia debería ser más pobre para ser más auténtica. El Papa Francisco muestra la vía de la simplicidad y me parece que el mensaje empieza a entenderse”.