Católicos lloran al ver que el gobierno comunista destruye la única parroquia de una ciudad de China

El gobierno de Qianyang destruyó la única parroquia de una zona muy pobre de Shaanxi, que cuenta con 2.000 católicos campesinos. La diócesis de Fengxiang es la única diócesis donde ni los fieles, ni el obispo están inscriptos en la Asociación Patriótica. Algunos consideran que la violencia contra la parroquia es un modo de obligarlos a inscribirse, mientras que otros indican que se debe a que la célula comunista, que preside el gobierno local, está constituida por maoístas radicales.

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Asia News.

BAJO LA VIGILANCIA DE UN GRUPO DE POLICÍAS.

El gobierno de Qianyang destruyó la única parroquia de una zona muy pobre de Shaanxi, bajo la vigilancia de un grupo de policías, mientras se escuchaba el llanto de algunos fieles que veían como se perpetraba con una topadora, durante la mañana del jueves 4 de abril. El templo, que cuenta con 2.000 católicos campesinos, fue construido con las ofrendas provenientes de otras comunidades de la diócesis. 

El edificio alojaba, en el piso superior, la sala destinada a la liturgia; en la planta baja estaban las oficinas y la residencia de las religiosas, que ofrecían a la población indigente ayudas sanitarias, consultas médicas y remedios. La diócesis de Fengxiang tiene un carácter especial en el panorama eclesial: es la única diócesis donde ni los fieles, ni el obispo están inscriptos en la Asociación Patriótica (AP), si bien hay una oficina de Asuntos Religiosos. Desde 2017, el obispo es Pedro Li Huiyuan, de 54 años.

Algunos consideran que la violencia contra la parroquia es un modo de obligar a la diócesis a plegarse a los nuevos reglamentos religiosos y de forzar al obispo y a los sacerdotes a inscribirse en la AP, mientras que otros indican que se debe a que la célula comunista, que preside el gobierno local, está constituida por maoístas radicales.