Obispos de Venezuela: «Todos los cristianos tenemos responsabilidad ética en la solución de los problemas del país»

La Conferencia Episcopal de Venezuela sostuvo que "no basta con el voto, sino que hay que ir más allá: al compromiso permanente por el Bien Común". "Hacemos nuestras las palabras de Francisco cuando expresa que 'nadie puede exigirnos que releguemos la religión a la intimidad secreta de las personas, sin influencia alguna en la vida social y nacional, sin opinar sobre los acontecimientos que afectan a los ciudadanos'", aseguró los prelados.

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Ecclesia Digital.

TRAS LAS ELECCIONES DE LA ASAMBLEA NACIONAL DONDE GANÓ LA OPOSICIÓN.

La Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), presidida por el arzobispo de Cumaná, Diego Rafael Padrón Sánchez, afirmó que todos los cristianos tienen "responsabilidad ética en la solución de los problemas del país" y felicitó al pueblo de por "el ejemplo de responsabilidad y compromiso cívicos demostrados en la Jornada Electoral del 6 de diciembre", donde la oposición ganó 112 bancas de los 167 de la Asamblea Nacional, en un comunicado. 

"No basta con el voto, sino que hay que ir más allá: al compromiso permanente por el Bien Común. Por eso, hacemos nuestras las palabras de Francisco cuando expresa que 'nadie puede exigirnos que releguemos la religión a la intimidad secreta de las personas, sin influencia alguna en la vida social y nacional, sin preocuparnos por la salud de las instituciones de la sociedad civil, sin opinar sobre los acontecimientos que afectan a los ciudadanos'. Esta Jornada Electoral puede dar origen a una nueva etapa en el camino político-social del país, aunque somos conscientes de que, la elección de una nueva Asamblea Nacional no producirá un cambio inmediato ni en la economía nacional, bajo el control del Poder Ejecutivo, ni en ciertas actitudes de relacionamiento institucional", aseguró la CEV.  

Frente a ello, los prelados indicaron que si hay "otros aspectos de la vida social y política que son competencia de la Asamblea Nacional, como la de ser foro idóneo de diálogo e intercambio para mantener el respeto de los derechos de las personas y comunidades y la consecuente elevación moral de la vida pública, no incluyendo en su agenda legislativa propuestas que atenten contra la vida como el aborto y la eutanasia, ni contra la integridad del matrimonio y la familia". Asimismo, pidió que "la Navidad ya próxima y este Año Santo de la Misericordia nos sirvan para seguir trabajando lealmente por el bienestar del País y el fortalecimiento de la democracia desde la perspectiva de la misericordia".