Decapitan a religiosa anciana que formaba a jóvenes sin recursos para que tuvieran un futuro mejor en República Centroafricana

Desconocidos decapitaron a la religiosa española de las Hijas de Jesús Inés Nieves Sancho, de 77 años, en el lugar donde daba clases de costura a jóvenes sin recursos en la aldea de Nola, en República Centroafricana. Aseguró que, a pesar de su edad, quiso continuar en esta misión "hasta que las fuerzas la acompañen". "Nos vimos en Pascua y ella no quería irse. Me dijo: ¡No estoy sola! ¡Están las muchachas!", afirmó la monja Elvira Tutolo, de las Hermanas de la Caridad de Santa Giovanna Antida Thouret. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Agencias.

SE DESCONOCE EL MOTIVO Y NINGÚN GRUPO LO REIVINDICÓ.

Desconocidos decapitaron a la religiosa española de las Hijas de Jesús Inés Nieves Sancho, de 77 años, en el lugar donde daba clases de costura a jóvenes sin recursos para que tuvieran un futuro mejor en la aldea de Nola, en República Centroafricana, el lunes 20 de mayo. No se sabe aún las razones del asesinato y ningún grupo lo reivindicó el homicidio. L'Osservatore Romano (LOR) indicó que la religiosa, que servía en el país africano desde hace varias décadas, era "amable y absolutamente pacífica". 

Aseguró que, a pesar de su edad, quiso continuar en esta misión "hasta que las fuerzas la acompañen". "Nos vimos en Pascua y ella no quería irse. Me dijo: ¡No estoy sola! ¡Están las muchachas!", afirmó la monja Elvira Tutolo, de las Hermanas de la Caridad de Santa Giovanna Antida Thouret, quien sirve en el país africano desde hace 18 años, sostuvo ACI Prensa. "Una mujer más que da la vida por Jesús y en el servicio a los pobres", sostuvo Francisco, al recordar a la misionera, que también tenía nacionalidad francesa, durante la audiencia general en la Plaza de San Pedro.

El Papa mencionó que la monja fue "asesinada bárbaramente en la República Centroafricana en el local donde enseñaba a coser", en los saludos a los fieles en francés, el miércoles 22 de mayo. LOR precisó que una hipotesis considera que el motivo de su asesinato es el comercio de órganos humanos. "Con frecuencia este tipo de acciones es considerado como de buena fortuna, en primer lugar para el éxito en la búsqueda de diamantes. Sucede también que son los mismos padres quienes matan a algún hijo o quienes se involucran en alguna conducta contra natura para propiciar la fortuna anhelada, una práctica que viene del vecino Camerún", aseveró.