El cardenal Zen denuncia que el presidente de China pretende «inculcar el pensamiento comunista y combinarlo con la teología»

El obispo emérito de Hong Kong, Joseph Zen, lamentó que entreguen "toda la administración de la Iglesia a las manos de la llamada 'Asociación Patriótica', que no es más que una marioneta en manos del gobierno", frente al próximo posible acuerdo entre la Santa Sede y China. "Tenemos que orar, lo que viene es una tragedia, y debilitará la fe, y nos remontaremos a los tiempos de las catacumbas", sostuvo.

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: InfoCatólica.

"VAN A ANIQUILAR A LA IGLESIA SUBTERRÁNEA".

El cardenal y obispo emérito de Hong Kong, Joseph Zen, denunció que uno de los objetivos del presidente de China, Xi Jinping, es "inculcar el pensamiento comunista y combinarlo con la teología", en una entrevista  en EWTN en el programa The World Over con Raymond Arroyo, antes que el mandatario logrará que la Asamblea Nacional Popular permita que permanezca en el cargo por tiempo indefinido.

El prelado lamentó que entreguen "toda la administración de la Iglesia a las manos de la llamada 'Asociación Patriótica', que no es más que una marioneta en manos del gobierno", frente al próximo posible acuerdo entre la Santa Sede y China. "No creo que nadie tenga una idea clara de lo que va a pasar porque ahora estamos alarmados por esos dos casos de los obispos legítimos a los que se les pidió ceder sus puestos a los obispos que fueron excomulgados. Pero no hablan de los otros cinco casos -que Xi planea reinsertar en la Iglesia-", explicó. 

"¿Qué pasará con los 30 obispos en la clandestinidad? Serán llevados a 'la jaula'. Van a aniquilar a la Iglesia subterránea. Y no sólo eso, incluso en la iglesia 'oficial' hay tantos buenos obispos, están allí, sufren, incluso pelean, y el gobierno se ve obligado a tolerarlos. Ahora con este nuevo arreglo, pierden todas las esperanzas en el futuro. Debemos estar listos para el martirio para que la fe católica se extienda en China. Tenemos que orar, porque lo que viene es una tragedia, y debilitará la fe, y nos remontaremos a los tiempos de las catacumbas", consideró.