«En Eritrea, el régimen ha comenzado a perseguir a la Iglesia Católica»

El sacerdote de la eparquía de Asmara, que es capellán de los eritreos en Europa, Abba Mussie Zerai, aseveró que las autoridades intentan evitar la influencia de la religión en el país "sin prohibir el culto, pero sí las actividades sociales".  Lamentó que quienes más pierden con la situación es "la población que ya no tiene estructuras serias y eficientes a las que recurrir". 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Fides.

CERRÓ ESCUELAS Y CLÍNICAS RELIGIOSAS.

El sacerdote de la eparquía de Asmara, que es capellán de los eritreos en Europa, Abba Mussie Zerai, denunció que "en Eritrea, el régimen ha comenzado a perseguir a las confesiones religiosas y, en particular, a la Iglesia Católica" para "intentar evitar su influencia en la sociedad: sin prohibir el culto, pero sí las actividades sociales". 

"Desde 1995, en el país está vigente una ley según la cual el Estado se adjudica a sí mismos todas las actividades sociales. Por lo tanto, estas no pueden ser llevadas a cabo por instituciones privadas o por instituciones religiosas. Hasta ahora, la ley se había aplicado de forma suave y no había afectado seriamente a la red de servicios ofrecidos tanto por los cristianos como por los musulmanes", aseguró el presbítero, al aseverar que "en los últimos meses se ha recrudecido la situación"

Zerai indicó que los funcionarios públicos cerraron cinco clínicas católicas en varias ciudades, y que en Asmara, el seminario menor también fue clausurado. "Al margen del daño económico a las confesiones religiosas individuales, quién más pierde es la población que ya no tiene estructuras serias y eficientes a las que recurrir. En Xorona, por ejemplo, cerraron el único dispensario en funcionamiento administrado por católicos", alertó.