Ratifican marco jurídico de relaciones entre la Iglesia Católica y Timor Oriental

Francisco recibió el pasado jueves al primer ministro de la República Democrática de Timor Oriental, Rui Maria de Araújo, quien ratificó un tratado que concede personalidad jurídica a la Iglesia en este pequeño país del Sudeste Asiático.

Autor: VenL. / Fuente: AIN.

"FRUTO DE AÑOS DE NEGOCIACIÓN".

Con poco más de 1.000.000 de habitantes, esta excolonia portuguesa, tras ser invadida en 1975 por Indonesia, obtuvo su independencia con la colaboración de la ONU, y se declaró en 2002 estado soberano, pasando a formar parte la comunidad internacional.

Francisco y Araujo se saludaron cada uno en su lengua y pasaron a la sala donde estuvieron reunidos 26 minutos, acompañados de un intérprete. En el momento del intercambio de regalos entró el séquito formado por 11 personas. Francisco otorgó al primer ministro el Medallón de la paz, un ejemplar de Evangelii Gaudium y otro de Laudato Si. Por su parte, Rui Maria de Araújo entregó al Santo Padre una caja con productos locales.

El comunicado de la oficina de prensa de la Santa Sede indicó que las conversaciones han transcurrido en un clima de cordialidad y se ha hablado de las buenas relaciones entre la Santa Sede y Timor Oriental, así como de la aportación histórica de la Iglesia en la edificación de la nación y de su colaboración con las autoridades civiles en diferentes ámbitos sociales, entre ellos la educación, la sanidad y la lucha contra la pobreza.

A continuación, el mandatario de Timor Oriental se entrevistó con el secretario de estado, el cardenal Pietro Parolin, a quien acompañaba el subsecretario para las relaciones con los estados, monseñor Antoine Camilleri. Al final del encuentro con el secretario de estado tuvo lugar, en la Sala de los Tratados del Palacio Apostólico Vaticano, el intercambio de los instrumentos de ratificación del Acuerdo entre la Santa Sede y la República Democrática de Timor Oriental firmado en Díli el 4 de agosto de 2015. El Acuerdo, que consta de un preámbulo y 26 artículos, sanciona el reconocimiento de la personalidad jurídica de la Iglesia y de sus instituciones y le garantiza la libertad de desarrollar la misión que le es propia en favor de la población de Timor Oriental.

El cardenal Parolín pronunció el siguiente discurso: "El Acuerdo, teniendo en cuenta el papel tanto histórico como actual desempeñado por la Iglesia Católica en la vida de la nación y del profundo enraizamiento de la religión católica en la sociedad timorense fija que de forma de estable el marco jurídico de las relaciones sea entre la Santa Sede y la República Democrática de Timor Oriental, y entre la Iglesia Católica y el Estado de Timor Oriental. Es fruto de años de negociados, sostenidos por un espíritu común de diálogo, de colaboración y de constante búsqueda de los instrumentos jurídicos más idóneos para sancionar el reconocimiento por parte del Estado timorense del servicio que la Iglesia católica desarrolla en favor de su pueblo. Ese compromiso atañe tanto al ámbito espiritual como al de la educación, al de la solidaridad, de la asistencia a los más débiles y de muchas otras actividades que contribuyen positivamente al crecimiento integral de ese amado pueblo".