Francisco sobre los 10 Mandamientos: «En Cristo, dejan de ser condena y se convierten en la auténtica Verdad de la vida humana»

El Pontífice aseguró que "la vida descrita en el Decálogo es una existencia agradecida, libre, auténtica, bendecida, adulta, custodio y amante de la vida, fiel, generosa y sincera, nosotros, casi sin darnos cuenta, nos encontramos delante a Cristo". 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: ACI Prensa.

DURANTE LA AUDIENCIA GENERAL EN EL AULA PABLO VI.

Francisco afirmó que "en Cristo, y solo en Él, el Decálogo deja de ser condena y se convierte en la auténtica verdad de la vida humana", e indicó que "Dios no pide nada antes de haber dado mucho más" por lo que exhortó a tener un corazón nuevo en Jesús, al concluir las reflexiones sobre los 10 Mandamientos durante la audiencia general en el Aula Pablo VI, el miércoles 28 de noviembre.

"Él nos invita a la obediencia para rescatarnos del engaño de las idolatrías que tienen tanto poder sobre nosotros. Esta vida liberada se convierte en acogida de nuestra historia personal y nos reconcilia con lo que, desde la infancia hasta el presente, hemos vivido, haciéndonos adultos y capaces de dar el justo peso a las realidades y a las personas de nuestra vida. La vida descrita en el Decálogo es una existencia agradecida, libre, auténtica, bendecida, adulta, custodio y amante de la vida, fiel, generosa y sincera", precisó el Papa. 

Aseguró que en ella "nosotros, casi sin darnos cuenta, nos encontramos delante a Cristo". "Gracias al Espíritu esta ley se convierte en vida, porque no es más una norma sino la carne misma de Cristo, que nos ama, nos busca, nos perdona, nos consuela y en su Cuerpo recompone la comunión con el Padre, perdida por la desobediencia del pecado", sostuvo el obispo de Roma.