Director de Caritas Sri Lanka: «Las cicatrices de la guerra son muy evidentes en desplazados internos»
El director nacional de Caritas Sri Lanka, Mahendra Gunatilleke, sostuvo que lanzaron "varias intervenciones psicosociales para superar los traumas". "La guerra terminó en mayo de 2009, dejando un rastro de destrucción de vidas y propiedades, y de un profundo desgarro de la dignidad humana. Miles de familias quedaron destruidas", aseguró.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Fides.
HUBO 30 AÑOS DE CONFLICTO BÉLICO.
El sacerdote y director nacional de Caritas Sri Lanka, Mahendra Gunatilleke, precisó que "las cicatrices de la guerra son muy evidentes en estos desplazados internos" y es por eso que lanzaron "varias intervenciones psicosociales para superar los traumas", al indicar que la entidad católica celebra 50 años en el país donde trabaja al servicio de los pobres, de los marginados y de la paz.
"La guerra terminó en mayo de 2009, dejando un rastro de destrucción de vidas y propiedades, y de un profundo desgarro de la dignidad humana. Miles de familias quedaron destruidas", aseguró, tras sostener que en 30 años de conflicto, miles de personas se vieron víctimas inocentes que perdieron sus hogares y sus medios de subsistencia, al padecer el luto, la discapacidad, el trauma y el desplazamiento forzado.
La Iglesia perdió 10 sacerdotes en el norte y este de la isla durante la guerra, y muchos otros llevan las marcas en sus cuerpos, como el director de Caritas de Vanni, Wasantha Seelan, que sufrió la amputación de la pierna, debido a las heridas sufridas al encontrarse en medio del fuego cruzado. Actualmente, en las diócesis de Anuradhapura, Batticaloa, Jaffna, Mannar y Trincomalee, se realizaron refugios temporales o transitorios para más de 2.400 familias; y hogares permanentes para otras 2.500.