Arzobispo Aguer: «La auténtica piedad popular hace referencia a la vida de la gracia y al orden sacramental»

El arzobispo de La Plata, Héctor Aguer, denunció "la imprudencia de algunos pastoralistas" que realizan "prácticas multitudinarias y cuasi supersticiosas que resultan imitaciones truchas de la piedad popular". Lamentó que algunos busquen "en el budismo o en el psicologismo, la 'espiritualidad' que necesita la sociedad abrumada por el vacío de sentido, que sólo puede ser colmado por el conocimiento y el amor del Dios verdadero". 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: AICA.

EXHORTÓ A RETOMAR CONTACTO CON LA TRADICIÓN DE LA IGLESIA.

El arzobispo de La Plata, Héctor Aguer, denunció "la imprudencia de algunos pastoralistas" que con "prácticas multitudinarias y cuasi supersticiosas que resultan imitaciones truchas de la auténtica piedad popular, eluden toda referencia a la vida de la gracia y al orden sacramental", al retomar el ciclo de espiritualidad con el título 'Beber del propio pozo', que comenzó el año pasado.

El prelado lamentó que, tras el diálogo interreligioso y la apertura al mundo moderno, muchos busquen "en el Oriente no cristiano, en el budismo especialmente o en el psicologismo, la 'espiritualidad' que necesita nuestra sociedad abrumada por el vacío de sentido, que sólo puede ser colmado por el conocimiento y el amor del Dios verdadero". Sostuvo que a los fieles a veces "se les hace creer, a veces, que la relación religiosa con Dios, la 'espiritualidad', se identifica, sin más, con la solidaridad y el compromiso social". 

Exhortó a retomar el contacto con la Tradición de la Iglesia, que se expresa en la vida y doctrina de maestros espirituales de todas las épocas, como san Ignacio de Antioquía, san Agustín, santa Catalina de Siena, el cardenal Pedro de Bérulle, fundador de la Congregación del Oratorio de san Felipe Neri, la carmelita descalza Santa Isabel de la Trinidad, o el beato Carlos de Foucauld. "Sus vidas y sus obras son realidades vivientes, comida y vestido para muchos católicos del siglo XXI, mal alimentados y que tapan con trapos su desnudez", reflexionó.