Francisco: «Quien confiesa a Jesús sabe que no ha de dar sólo opiniones, sino la vida»
El Papa aseguró que "quien confiesa a Jesús se comporta como Pedro y Pablo: lo sigue hasta el final; no hasta un cierto punto sino hasta el final, y lo sigue en su camino, no en nuestros caminos". "Su camino es el camino de la vida nueva, de la alegría y de la resurrección, el camino que pasa también por la cruz y la persecución", afirmó el Pontífice.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: ACI Prensa.
EN LA SOLEMNIDAD DE SAN PEDRO Y SAN PABLO.
Francisco afirmó que "quien confiesa a Jesús sabe que no ha de dar sólo opiniones, sino la vida", y recordó que "una Iglesia que reza está protegida por el Señor y camina acompañada por él", al presidir la Misa, el 29 de junio, por la Solemnidad de San Pedro y San Pablo, donde bendijo los palios destinados a los arzobispos metropolitanos nombrados en este año y que les serán impuestos en sus respectivas diócesis.
"Quien confiesa a Jesús se comporta como Pedro y Pablo: lo sigue hasta el final; no hasta un cierto punto sino hasta el final, y lo sigue en su camino, no en nuestros caminos. Su camino es el camino de la vida nueva, de la alegría y de la resurrección, el camino que pasa también por la cruz y la persecución", reflexionó el Pontífice, al destacar que la vida del apóstol, que brota de la confesión y desemboca en el ofrecimiento, transcurre cada día en la oración".
El Papa indicó que la oración es "el agua indispensable que alimenta la esperanza y hace crecer la confianza", que "nos hace ir adelante en los momentos más oscuros, porque enciende la luz de Dios". "En la Iglesia, la oración es la que nos sostiene a todos y nos ayuda a superar las pruebas. Qué urgente es que en la Iglesia haya maestros de oración, pero que sean ante todo hombres y mujeres de oración, que viven la oración", aseguró.