Imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima ingresa a la Sede de la ONU en Nueva York

El observador permanente ante la ONU, Bernardito Auza, presentó en una conferencia el "plan de paz" de la Santísima Virgen, donde invitó a todos los que trabajan por la paz a aprender las lecciones universales del Mensaje de Fátima. "El mensaje de paz que los pastorcitos dijeron que trajo la Dama del Cielo, y las prácticas de conversión, transformación del corazón, oración y compromiso que ella indicó son tan importantes hoy para la paz del mundo como lo fueron hace un siglo", ratificó el arzobispo filipino. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Gaudium Press.

"MARÍA VINO COMO UNA EMBAJADORA DE LA PAZ".

Una imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima ingresó a la Sede de la ONU en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, durante un evento organizado por la Misión Permanente de Portugal y la Misión del Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, el 12 de mayo pasado. El arzobispo filipino y observador permanente ante la ONU, Bernardito Auza, presentó en una conferencia el "plan de paz" de la Santísima Virgen, donde invitó a todos los que trabajan por la paz a aprender las lecciones universales del Mensaje de Fátima

"Cuando examinamos el mensaje, que los tres niños pastores de Fátima, Lucía y sus primos Francisco y Jacinta testifican, podemos decir que María esencialmente vino como una Embajadora de la Paz", sostuvo, al recordar que la imagen visitó la ONU hace 67 años. El 8 de diciembre de 1952, junto a la estatua de María rezaron por la paz en el mundo y el fin de la guerra de Corea. El prelado pidió aprovechar la ocasión y orar por el fin de la guerra en Siria, el cese de las amenazas en la península de Corea y el fin de la violencia en Sudán del Sur, Somalia, Yemen, República Centroafricana, República Democrática del Congo y el Este de Ucrania, así como todas las demás regiones en conflicto.

Auza recordó la actualidad de las revelaciones particulares recibidas por los tres pequeños pastores en Cova de Iría. "Cuando celebramos el centenario de Fátima, entendemos que no estamos celebrando meramente una serie de eventos en el pasado, sino algo, creo, bastante actual, con relevancia duradera para nuestro presente y nuestro futuro. El mensaje de paz que los pastorcitos dijeron que trajo la Dama del Cielo, y las prácticas de conversión, transformación del corazón, oración y compromiso que ella indicó son tan importantes hoy para la paz del mundo como lo fueron hace un siglo", ratificó.