Arzobispo greco-católico de Ucrania: «Hay una guerra no civil que provocó en Europa la crisis humanitaria más grande»
El arzobispo mayor de Kiev, Sviatoslav Shevchuk, afirmó que en Ucrania "no hay un enfrentamiento entre los ciudadanos de habla ucrania y los de habla rusa", sino una guerra desatada por Rusia, que ocupó parte del territorio, la Crimea anexada a Rusia y la Ucrania oriental. "Las torturas que ahora se hacen en este territorio ocupado son crímenes contra la humanidad; hay muchos soldados y civiles que fueron enterrados en fosas comunes", denunció.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: AICA.
DESPUÉS DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL.
El arzobispo mayor de Kiev, Sviatoslav Shevchuk, afirmó que en Ucrania existe "una guerra -no civil- que provocó en Europa la crisis humanitaria más grande desde la segunda guerra mundial", dado que produjo el desplazamiento de millones de personas "hacia el interior, que tuvieron que abandonar sus hogares que fueron destruidos", durante una entrevista con AICA, en la sede de la Eparquía de la Iglesia Católica Ucrania en Buenos Aires, durante su corta visita a Argentina. Ratificó que en el país europeo hay una guerra desatada por Rusia, que ocupó parte del territorio de Ucrania, la Crimea anexada a Rusia y la Ucrania oriental.
"No hay una guerra civil, una tercera parte de los soldados que defienden Ucrania, habla ruso. No hay un enfrentamiento entre los ciudadanos de habla ucrania y los de habla rusa en Ucrania. Estamos todos unidos como jamás lo estuvimos en la historia", aseguró el prelado. Asimismo, indicó que según cifras oficiales más de 10.000 civiles murieron en este conflicto, pero estimó que "la cifra real es mucho más alta: por lo menos, el doble". "Hay un millón de niños ucranianos víctimas directas de la guerra, y en la región oriental de Ucrania, sometida a los ataques del ejército ruso, viven 12.000 que cada día están en peligro de muerte porque sufren los bombardeos y enfrentamientos militares constantes", sostuvo.
Shevchuk precisó que hay 136 prisioneros de guerra ucranianos, y unos 450 que no se sabe si están vivos o muertos. "Hagamos de todo para que esos prisioneros de guerra puedan ser liberados. Hice una apelación a la comunidad internacional para que se haga algo para aliviarles su cautiverio. Según el ordenamiento legal ruso, al prisionero de guerra se le deben aplicar los reglamentos y tratados internacionales, pero con nuestros prisioneros de guerra no hay ningún respeto. Los están torturando. Las torturas que ahora se hacen en este territorio ocupado son crímenes contra la humanidad; hay muchos soldados y civiles que fueron enterrados en fosas comunes", denunció.