Obispo de Austria: «El comportamiento de los cuatro cardenales es un servicio al Magisterio de la Iglesia»
El obispo auxiliar de Salzburgi, Andreas Laun, indicó que leyó las inquietudes que los cardenales Brandmüller, Burke, Caffarra y Meisner enviaron a Francisco y que está "de acuerdo con ellas". "Sería en cierto modo una vergüenza si, por temor, alguien no hablara. Como dijo San Gregorio Magno, el silencio puede ser un pecado, y Otto von Habsburg afirmó que la cobardía es uno de los vicios principales de nuestro tiempo", recordó.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: InfoCatólica.
CON LA PRESENTACIÓN DE LAS PREGUNTAS SOBRE AMORIS LAETITIA.
El obispo auxiliar de Salzburgi, Austria, y profesor de Teología Moral en la Facultad de Filosofía y Teología de Heiligenkreuz, Andreas Laun, consideró que "el comportamiento de los cuatro cardenales es un servicio al Magisterio de la Iglesia", al referirse a las cinco preguntas que los cardenales Walter Brandmüller, Raymond Burke, Carlo Caffarra y Joachim Meisner enviaron a Francisco, tras la publicación de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia, en una entrevista con OnePeterFive.
"He leído las inquietudes de los cuatro cardenales y estoy de acuerdo con ellas. Además, conozco personalmente en especial a los cardenales Meisner y Caffarra, y sé cuán competentes son. Con ellos, estoy en la mejor de las compañías", destacó el prelado, al sostener que si se lo ofrecen firmaría las dubia "después de leerlas de nuevo y quizás tras consultar al menos con uno de los cardenales". Afirmó que no existe alguna posibilidad de que los divorciados en nueva unión puedan recibir los sacramentos sin enmendar previamente su modo de vida. "Esta cuestión objetiva no tiene ninguna relación con la misericordia. ¿Podría San Juan Bautista haber 'autorizado misericordiosamente' a Herodes a tener la mujer de su hermano?", cuestionó.
"El discernimiento espiritual, cuya importancia tanto subraya Francisco, es como un médico que realiza un diagnóstico pero que, acto seguido, no presta un verdadero servicio al paciente al presentar benignamente la enfermedad –como si fuera preferible tenerla– aún cuando conoce los peligros que presenta", aseguró. Indicó que no conoce cardenales u obispos que sean cercanos a estos cuatro cardenales, pero que no se atreven a decirlo públicamente. "Sería en cierto modo una vergüenza si, por temor, alguien no hablara. Como dijo San Gregorio Magno, el silencio puede ser un pecado, y Otto von Habsburg afirmó que la cobardía es uno de los vicios principales de nuestro tiempo", recordó Laun.