Suspenden hasta los casamientos en una capilla de Florencio Varela por robos y destrozos constantes
La capilla Sagrado Corazón de Jesús del barrio Don Orione, que pertenece a la Parroquia Madre de Dios, en la localidad bonaerense de Florencio Varela, debió cambiar obligatoriamente los hábitos dado que por los constantes robos y destrozos que sufrió el templo ya no se celebran casamientos, los fieles temen asistir a Misa cuando termina de noche, y los padres dudan en enviar a sus hijos a catequesis.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Clarín.
"SE LLEVARON DESDE PARLANTES HASTA EL FLORERO DE LA VIRGEN".
La capilla Sagrado Corazón de Jesús del Barrio Don Orione de Florencio Varela.
La capilla Sagrado Corazón de Jesús del barrio Don Orione, que pertenece a la Parroquia Madre de Dios, en la localidad bonaerense de Zeballos, Florencio Varela, debió cambiar obligatoriamente los hábitos dado que por los constantes robos y destrozos que sufrió el templo ya no se celebran casamientos, los fieles temen asistir a Misa cuando termina de noche, y los padres dudan en enviar a sus hijos a catequesis. Desde 2010 padecen robos y distintos ataques vandálicos. Durante el último ataque, los ladrones se llevaron elementos que el sacerdote Daniel utiliza para celebrar la Eucaristía.
"El último fin de semana de enero entraron y se llevaron desde los bafles hasta el florero que está debajo de la imagen de la Virgen. La mayoría de las veces entran únicamente para romper cosas, es inentendible. Antes había casamientos y organizábamos una gran fiesta por el Día del Niño. Colocábamos mesas en el patio y se compartía la comida. Lamentablemente esto lo tuvimos que suspender por los hechos de violencia", denunció Néstor López, quien vive a pocos metros de la capilla y es uno de los vecinos que la construyó y se encarga de su mantenimiento. En 2012, tuvieron que construir un nuevo edificio en el mismo predio por los destrozos al anterior. El entonces obispo Luis Stöckler celebró la Misa de reinauguración. "Acá se hizo todo con esfuerzo. Hace 35 años hice los planos y con el esfuerzo de centenares de vecinos lo llevamos esto adelante para la gente del barrio. Por eso es inexplicable lo que sucede", indicó el vecino.
Asimismo, López denunció que los responsables de los actos delictivos son jóvenes de una patota que anda por el barrio, y que desde la comisaría indicaron que como "son todos menores de edad y que no pueden hacer nada". Dos domingos atrás, los vecinos escucharon ruidos y vieron movimientos sospechosos, por lo que dieron aviso a los responsables del lugar. "Cuando llegamos, un pibe se escapaba por la ventana. Unos compañeros lo corrieron, pero no lo alcanzaron. Se robaron hasta la cortadora de pasto que se usa para el parque. Ya no sabemos cuál es la solución, pero vamos a continuar y le abrimos las puertas a las familias del barrio, pese a que los padres tienen miedo de que los chicos vengan solos porque los roban", sostuvo una de las catequistas. "Hace más de cinco años, una noche nos despertamos por el humo que había. Resulta que habían quemado la capilla. En ese momento nos pusimos a conseguir materiales para construir la nueva", sostuvo Carlos Rodríguez, que vive a dos cuadras de la capilla.