El cardenal Sarah calificó pastoral familiar que no respeta doctrina católica de «una forma de herejía» y «una patología esquizofrénica peligrosa»

El Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, Robert Sarah, sostuvo que incluso miembros de la Iglesia pueden tener la "tentación de suavizar la enseñanza de Cristo sobre el matrimonio y la familia en diversos grados". "La idea consistiría en colocar el Magisterio en una caja bonita y lo separa de la práctica pastoral, lo que podría evolucionar de acuerdo a tales circunstancias, las modas y los énfasis. Esto es una forma de herejía y una patología esquizofrénica peligrosa", aseveró. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Catholic News Agency.

EN EL ENCUENTRO MUNDIAL DE LAS FAMILIAS.

El cardenal y Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, Robert Sarah, calificó de "una forma de herejía" y "una patología esquizofrénica peligrosa" la pastoral familiar que no respeta doctrina católica, durante su intervención en el Encuentro Mundial de las Familias en Filadelfia, Estados Unidos, el 23 de septiembre pasado.

"Incluso los miembros de la Iglesia pueden tener la tentación de suavizar la enseñanza de Cristo sobre el matrimonio y la familia en diversos grados. La idea consistiría en colocar el Magisterio en una caja bonita y lo separa de la práctica pastoral, lo que podría evolucionar de acuerdo a tales circunstancias, las modas y los énfasis. Esto es una forma de herejía y una patología esquizofrénica peligrosa", aseveró.

Sarah sostuvo que la familia cristiana está llamada a dar testimonio de que "el amor hasta el final es posible". "El mundo de hoy necesita santos con testimonio heroico de defender y proteger la familia. La fe necesita un lugar donde se gesta, donde puede crecer, donde puede convertirse en una experiencia vivida. Desde el comienzo de la creación, Dios escogió la familia como este lugar. En la familia de las promesas de Dios se vuelven reales. La familia es la memoria viva de la fidelidad de Dios. La familia es la fuente de la esperanza", afirmó.