Caritas Uzbekistán continúa con la ayuda a los más necesitados a pesar de las restricciones del Gobierno
"Toda nuestra acción se controla y al mismo tiempo nos impiden registrarnos legalmente para obstaculizar nuestro trabajo. Nunca hemos tenido éxito porque el gobierno mantiene reglas cambiantes y nos impide hacer el registro", afirmó el director ejecutivo de Caritas en el país asiático.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Gaudium Press.
EL ESTADO MANTIENE POLÍTICAS CONTRARIAS A LA RELIGIÓN
El director ejecutivo de Caritas Uzbekistán, Francis Stopkowic, presente en Roma para la Asamblea General de la organización, aseguró que la Iglesia en el país asiático continúa su labor de servicio a los más necesitados a pesar de que el Estado entorpece su actividad.
"Toda nuestra acción se controla y al mismo tiempo nos impiden registrarnos legalmente para obstaculizar nuestro trabajo. Varias veces en los últimos 10 años hemos preparado todo el papeleo para que Caritas sea puesta en regla. Muchos documentos, todos traducidos al idioma uzbeko. Nunca hemos tenido éxito porque el gobierno mantiene reglas cambiantes y nos impide hacer el registro. No podemos hacer nada", afirmó Stopkowic.
Uzbekistán mantiene políticas contrarias a la religión y no colabora con la acción caritativa a pesar de que más de 5 millones de personas viven con menos de un dólar al día y un alto porcentaje de la población rural padece pobreza. La acción de la Iglesia debe centrarse en las parroquias directamente, dado que Caritas no pudo ser registrada de forma independiente. A pesar de estas graves limitaciones, la Iglesia en Uzbekistán, que cuenta con apenas unos 3.500 fieles, continúa con su labor.