Miles de personas participan del Vía Crucis Submarino en Puerto Madryn

"Fue un honor haber sido delegado para esta responsabilidad de hacer las lecturas y guiar el Vía Crucis en el fondo del mar, para una persona de fe como yo, sumado a que mi género de vida es de buceador de toda la vida. En el fondo del mar los sentidos se sensibilizan", aseguró el buzo Ricardo Orri, quien lideró la etapa submarina.

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Télam y Valores Religiosos.

ES ÚNICO EN EL MUNDO Y SURGIÓ EN 2003.

Miles de personas familias, buzos, nadadores y kayakistas participaron en procesión y sobre el Muelle Piedra Buena y la costa de la ciudad del Vía Crucis Submarino, en Puerto Madryn, Chubut. La idea del Vía Crucis Submarino surgió en 2003 para celebrar la festividad católica ligándola con el buceo y se convirtió en parte de la historia de la ciudad.

El sacerdote Jesús María Hurtado, que encabezó la procesión en tierra, pasó la posta al buzo Ricardo Orri, quien lideró la etapa submarina. Desde su origen y hasta el año pasado, toda la marcha la lideraba el sacerdote Juan Gabriel Arias, quien se trasladó a misionar a Mozambique y, al no haber otro sacerdote con brevet de buzo, la Iglesia aceptó que Orri guiara bajo el agua guiara a los fieles. En la etapa submarina participaron buzos, nadadores de superficie, practicantes de snorkel y embarcaciones pequeñas sin motor, como kayaks, stand up y botes pequeños. "Fue un honor haber sido delegado para esta responsabilidad de hacer las lecturas y guiar el Vía Crucis en el fondo del mar, para una persona de fe como yo, sumado a que mi género de vida es de buceador de toda la vida. En el fondo del mar los sentidos se sensibilizan, más el entorno con todos los buzos; es difícil de explicar, pero es una cosa que te consterna el espíritu", reflexionó Orri.

Al finalizar el recorrido, el intendente de la ciudad de Puerto Madryn, Ricardo Sastre, entregó un cuadro especial como agradecimiento al sacerdote Hurtado por su voluntad para que éste sea el Vía Crucis de la ciudad. En esta oportunidad, contaron con la participación de la Escuela de Buceo de Mar del Plata ‘Thalassa’, que no sólo regaló la nueva cruz luminosa con la cual se llevó a cabo el Vía Crucis Submarino, sino que además aportó una delegación de medio centenar de buzos en la procesión subacuática por las últimas estaciones del camino de la Pasión de Cristo. Desde la edición anterior, el Vía Crucis Submarino cuenta con la bendición de Francisco.