Me han puesto brackets
¡Hola! Soy Aquiles, un intento de joven cristiano español. Cada dos semanas, os iré contando lo que me ha pasado, lo que he hecho y lo que creo que debería haber hecho.
Me han puesto brackets. Los que alguna vez hayan tenido sabrán lo que es. Los primeros días molestan un poco, pero luego te vas acostumbrando, y al final casi ni los notas. Sin embargo a mí, ponérmelos me ha afectado mucho, y me ha hecho darme cuenta del grado de importancia que le otorgo a mi imagen y a lo que la gente piense de mí.
Cuando me los pusieron pasé realemente unos días muy malos, casi sin abrir la boca, pensando que me quedaban muy mal, y asintiendo resignado cuando me decían: ¡Te han puesto aparato! considerando realmente como un trauma esto que me hacía ser menos atractivo.
Luego no es para tanto, la gente rápidamente se acostumbra y nadie te dice nada, pero este episodio me ha hecho darme cuenta de la excesiva importancia que le doy a lo que la gente piense de mí: que me alaben, que me vean uno más, no un "bicho raro", que me consideren atractivo, divertido… y toda una lista de superficialidades innecesarias.
Esto también hace que muchas veces sólo juzgue a la gente superficialmente. Solo me hago amigo de una chica si es atractiva, busco amigos que me hagan parecer más 'guay' o 'copado', como dicen en Argentina, que hagan las cosas que todo el mundo hace y dejo de lado eso que dijo Jesús de no juzguéis y no seréis juzgados.
He hecho un pequeño propósito. En adelante intentaré preocuparme menos por mi imagen exterior y darle mucha más importancia a mi vida interior, porque cuando me muera y me presente ante Dios, no se me juzgará por lo 'guapo' y 'guay' que fui, sino que como bien avisaba el santo español Juan de la Cruz: al atardecer de la vida, te examinarán del amor,
Esto es todo por hoy. Espero que os haya ayudado el consejo de uno como vosotros, el consejo de un amigo.