Iglesia en España invita a la hora del Ángelus a hacer que «suenen las campanas de los templos para invitar a orar»

La Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Española, presidida por el cardenal Juan José Omella, exhortó a rezar por los que "permanecen en casa y hacer llegar, a quienes sirven y trabajan, la ayuda del Señor y el agradecimiento de la Iglesia". "En estos días de singular y dolorosa experiencia ciudadana y eclesial, a la que nos llevó la pandemia del coronavirus, la Iglesia Católica está llamada a ofrecer sus recursos en favor de los afectados así como la presencia del Señor que salva, animando a todos los cristianos a interceder ante la Madre de Dios, que nos ampara y escucha nuestra oración", reflexionó. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Conferencia Episcopal Española.

FRENTE A LA PANDEMIA DEL CORONAVIRUS.

La Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Española (CEE), presidida por el cardenal Juan José Omella, invitó a la hora del Ángelus al mediodía a hacer que «suenen las campanas de nuestros templos para invitar a orar a quienes permanecen en casa y hacer llegar, a quienes sirven y trabajan, la ayuda del Señor y el agradecimiento de la Iglesia», frente a la crisis por la pandemia por el coronavirus, a través de un comunicado, el domingo 15 de marzo.

«En estos días de singular y dolorosa experiencia ciudadana y eclesial, a la que nos llevó la pandemia del coronavirus, la Iglesia Católica está llamada a ofrecer sus recursos en favor de los afectados así como la presencia del Señor que salva, animando a todos los cristianos a interceder ante la Madre de Dios, que nos ampara y escucha nuestra oración. Así, proponemos que a las 12 del mediodía suenen las campanas para mostrar nuestro agradecimiento y fraterna solidaridad y orar», indicó. 

Los prelados exhortaron a rezar «por los enfermos contagiados por el virus, por sus familiares, por quienes están en cuarentena y por otros enfermos que ven afectada su atención por la prioridad de atajar la pandemia; por los trabajadores de todos los Centros y Servicios Sanitarios y todos los servicios públicos; por los Equipos de Emergencias, por los de Protección Civil y por las Fuerzas de Seguridad del Estado; por los sacerdotes, los Monasterios de vida contemplativa y la vida consagrada, que con su oración y entrega siguen dando esperanza a todos los ciudadanos», entre otros.