Obispo de Holanda denuncia que «la caja de Pandora está abierta y habrá implicaciones para toda la Iglesia» tras el Sínodo de la Amazonía

 El obispo auxiliar de s-Hertogenbosch, Rob Mutsaerts, aseveró que "las palabras clave del documento final del Sínodo no fueron Madre Tierra y ecosistema, sino viri probati, diaconisas y rito amazónico". "Fue el cardenal Hummes quien empujó el resultado en esta dirección. Los obispos locales, comenzando por Alemania, preguntarán lo mismo", indicó el prelado, que espera que la Exhortación Apostólica de Francisco "destruya el documento final". "¿No deberíamos llevar a Cristo a la Amazonía? Más bien, parece que el Sínodo trajo la idolatría amazónica a Roma", consideró. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: InfoCatólica

CONSIDERÓ QUE EL ÚLTIMO SÍNODO FUE "UN ENGAÑO A LOS FIELES".

Diócesis de Haarlem - Amsterdam.

El obispo auxiliar de s-Hertogenbosch (Den Bosch), Rob Mutsaerts, aseveró que tras el Sínodo de la Amazonía "la caja de Pandora está abierta y habrá implicaciones para toda la Iglesia", dado que "naturalmente, ahora los resultados no se limitarán a la región amazónica", en una entrevista con el diario italiano 'Il Giornale', difundió 'InfoCatólica'. La Exhortación Apostólica Postsinodal de Francisco al respecto se publicará "en las próximas semanas", según Télam, 

"Las palabras clave del documento final del Sínodo no fueron Madre Tierra y ecosistema, sino viri probati, diaconisas y rito amazónico. Fue el cardenal Hummes quien empujó el resultado en esta dirección. Los obispos locales, comenzando por Alemania, preguntarán lo mismo", denunció Mutsaerts, quien espera que la Exhortación Apostólica de Francisco "destruya el documento final". "¿No deberíamos llevar a Cristo a la Amazonía? Más bien, parece que el Sínodo trajo la idolatría amazónica a Roma", consideró. "El Sínodo fue un engaño a los fieles, esta es la triste conclusión, una burla de nuestra gloriosa fe, un colapso de la tradición", lamentó. 

Precisó que la Iglesia "se está ocupando de algo que no tiene que ver con su misión, que es guiar a los fieles hacia Cristo". Afirmó que "el 80% de la población amazónica vive en grandes ciudades, y el problema de la falta de sacerdotes no es diferente al de muchas otras áreas del mundo". "El problema es más bien una falta de fe. Todo esto no se resuelve aceptando sacerdotes casados. Es suficiente ver lo que sucede en la iglesia anglicana, donde los sacerdotes casados son una práctica común. La crisis en otras iglesias es aún mayor que en la iglesia católica: el colapso de la fe es dramático", explicó el prelado.