Patriarca Kirill lamenta que «las olas de las escisiones» pongan en duda la unidad de los ortodoxos
El patriarca ortodoxo ruso, Kirill, reflexionó que "el milagro de la encarnación divina ocurrido hace más de 2.000 años colma nuestras almas de una alegría inefable", tras indicar que en la actualidad la Iglesia ortodoxa atraviesa tiempos difíciles. "Vemos como la tormenta de las pugnas y contradicciones pone en duda la unidad de los ortodoxos, como la gente, perturbada por el enemigo y el tentador, prefiere la fuente turbia de las maliciosas herejías a la fuente del agua viva de la fe", denunció.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Valores Religiosos.
EN SU SALUDO POR LA NAVIDAD QUE CELEBRARÁN EL MARTES 7 DE ENERO.
Captura YouTube russianchurch.
El patriarca ortodoxo ruso, Kirill, lamentó que "las olas de las escisiones" pongan en duda la unidad de los ortodoxos, en un mensaje enviado a los fieles por Navidad, por el "nacimiento de nuestro Señor y Salvador Jesús Cristo", que celebrarán el martes 7 de enero, dado que se orientan por el calendario juliano.
Afirmó que "el milagro de la encarnación divina ocurrido hace más de 2.000 años colma nuestras almas de una alegría inefable", tras indicar que en la actualidad la Iglesia ortodoxa atraviesa tiempos difíciles. "Vemos como las olas de las escisiones mece el navío de la Iglesia, que la tormenta de las pugnas y contradicciones pone en duda la unidad de los ortodoxos, como la gente, perturbada por el enemigo y el tentador, prefiere la fuente turbia de las maliciosas herejías a la fuente del agua viva de la fe", denunció.
Kirill exhortó a los fieles a valorar hasta qué punto sus conductas siguen los mandatos de Dios. "Pensemos si seguimos con nuestras acciones, si no ponemos en primer lugar nuestro propio bienestar, si no tememos que alguien sea mejor, más talentoso que nosotros, si no le hacemos mal a esa persona para tratarlo de ensuciar ante otros, derribar del pedestal para elevarnos nosotros mismos ¿Podría suceder que la fuente de la verdad deja de ser para nosotros el Señor y sus sagrados mandamientos, para suplantarla por nosotros mismos?", cuestionó.