Francisco: «Que la Virgen María y su casto esposo san José nos ayuden a ponernos a la escucha de Jesús que viene»

El Pontífice indicó que la figura de san José es "aparentemente en segundo plano, pero en cuya actitud está encerrada toda la sabiduría cristiana". "En Adviento, la Liturgia propone a Juan Bautista, a María y a José, de los tres es el más modesto. Uno que no predica, no habla, pero trata de hacer la voluntad de Dios; y la cumple en el estilo del Evangelio y de la Bienaventuranzas: 'Dichosos los pobres de corazón, porque el reinado de Dios les pertenece'", reflexionó. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Vatican News.

EN EL ÚLTIMO DOMINGO DE ADVIENTO.

Francisco exhortó a "que la Virgen María y su casto esposo san José nos ayuden a ponernos a la escucha de Jesús que viene, y que pide ser acogido en nuestros proyectos y en nuestras elecciones" y para que esperemos el nacimiento del Niño dejándonos guiar por Dios en nuestras vidas, en el último domingo de Adviento, desde el Palacio Apostólico del Vaticano, el domingo 22 de diciembre. 

El Pontífice indicó que la figura de san José es "aparentemente en segundo plano, pero en cuya actitud está encerrada toda la sabiduría cristiana". "En el tiempo de Adviento la Liturgia propone a Juan Bautista, a María y a José, de los tres es el más modesto", destacó el obispo de Roma.

"Uno que no predica, no habla, pero trata de hacer la voluntad de Dios; y la cumple en el estilo del Evangelio y de la Bienaventuranzas: 'Dichosos los pobres de corazón, porque el reinado de Dios les pertenece'", reflexionó, al afirmar que san José confía totalmente en Dios y que fue esta confianza inquebrantable la que le permitió aceptar "una situación humanamente difícil y, en cierto sentido, incomprensible".