Francisco reitera a los obispos que tienen «la obligación inderogable de cuidar atentamente la relación con sus sacerdotes»
El Pontífice precisó que "la relación entre obispos y nuestros sacerdotes representa indiscutiblemente una de las cuestiones más vitales de la vida de la Iglesia", dado que "es la espina dorsal sobre la que se rige la comunidad diocesana". "El obispo es el pastor, el signo de unidad para toda la Iglesia diocesana. A algunos obispos les cuesta establecer relaciones aceptables con sus sacerdotes, arriesgándose de esa manera a arruinar su misión y, además, debilitar la misma misión de la Iglesia", afirmó.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: ACI Prensa.
PIDIÓ QUE SE COMPORTEN COMO UN PADRE CON ELLOS.
Francisco precisó que "el obispo es el pastor, el signo de unidad para toda la Iglesia diocesana" por lo que "el padre guía a los propios sacerdotes y a toda la comunidad de creyentes; y tiene la obligación inderogable de cuidar atentamente la relación con sus sacerdotes", y es por ello que deben ser como un padre para los presbíteros, frente a la Asamblea General de la Conferencia Episcopal Italiana, en el Aula del Sínodo, lunes 20 de mayo.
El Papa precisó que "la relación entre obispos y nuestros sacerdotes representa indiscutiblemente una de las cuestiones más vitales de la vida de la Iglesia", dado que "es la espina dorsal sobre la que se rige la comunidad diocesana". "El obispo es el pastor, el signo de unidad para toda la Iglesia diocesana. A algunos obispos les cuesta establecer relaciones aceptables con sus sacerdotes, arriesgándose de esa manera a arruinar su misión y, además, debilitar la misma misión de la Iglesia. Los sacerdotes son nuestros más cercanos colaboradores y hermanos", aseguró.
"La relación sólida entre el obispo y sus sacerdotes se basa en el amor incondicional testimoniado por Jesús sobre la cruz que representa la única regla verdadera de comportamiento. Los obispos tenemos el deber de presencia y de cercanía al pueblo cristiano, pero, en particular, a nuestros sacerdotes, sin discriminación y sin preferencias. No debemos caer en la tentación de acercarnos sólo a los sacerdotes simpáticos o aduladores, y evitar a aquellos que, según el obispo, son antipáticos", afirmó el obispo de Roma.