Francisco y Gran imán de Al Azhar firmaron «Documento sobre la fraternidad humana por la paz mundial y la convivencia común»
Fracisco y Ahmed al Tayyeb condenaron "todas las prácticas que amenazan la vida como los genocidios, los actos terroristas, las migraciones forzosas, el tráfico de órganos humanos, el aborto y la eutanasia, y las políticas que sostienen todo esto". "Todos deben proteger el don de la vida desde su inicio hasta su muerte natural. Es evidente que la familia es esencial, como núcleo fundamental de la sociedad y de la humanidad. Atacar la institución familiar representa uno de los males más peligrosos de nuestra época", precisaron los líderes religiosos.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: La Santa Sede.
DURANTE SU VIAJE APOSTÓLICO A EMIRATOS ÁRABES UNIDOS.
Twitter The National.
Francisco y el Gran imán de Al Azhar, Ahmed al Tayyeb, firmaron un histórico 'Documento sobre la fraternidad humana, por la paz mundial y la convivencia común', en el que condenaron "todas las prácticas que amenazan la vida como los genocidios, los actos terroristas, las migraciones forzosas, el tráfico de órganos humanos, el aborto y la eutanasia, y las políticas que sostienen todo esto", el lunes 4 de febrero pasado, en Abu Dhabi, durante el viaje del Pontífice a Emiratos Árabes Unidos.
"El primer y más importante objetivo de las religiones es el de creer en Dios, honrarlo y llamar a todos los hombres a creer que este universo depende de un Dios que lo gobierna, es el Creador que nos ha plasmado con su sabiduría divina y nos ha concedido el don de la vida para conservarlo. Un don que nadie tiene el derecho de quitar, amenazar o manipular a su antojo, al contrario, todos deben proteger el don de la vida desde su inicio hasta su muerte natural", precisaron los líderes religiosos,
El obispo de Roma y Al Tayyeb Indicaron que "es evidente que la familia es esencial, como núcleo fundamental de la sociedad y de la humanidad, para engendrar hijos, criarlos, educarlos, ofrecerles una moral sólida y la protección familiar", y que por lo tanto "atacar la institución familiar, despreciándola o dudando de la importancia de su rol, representa uno de los males más peligrosos de nuestra época".