Cardenal Sarah: «Quienes hablan en nombre de la Iglesia deben ser fieles a las enseñanzas inmutables de Cristo»
El prefecto de la Congregación para el Culto Divino, Robert Sarah, precisó que "sólo viviendo en armonía con el designio creador de Dios encuentran las personas una plenitud profunda y duradera". "La promiscuidad es la causa de tanto sufrimiento innecesario, de corazones rotos, de soledad, y de tratar a los otros como un medio para la propia satisfacción sexual", indicó Sarah.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Religión en Libertad.
DESTACÓ LA VIRTUD DE LA CASTIDAD.
El cardenal y prefecto de la Congregación para el Culto Divino, Robert Sarah, afirmó que "quienes hablan en nombre de la Iglesia deben ser fieles a las enseñanzas inmutables de Cristo, porque sólo viviendo en armonía con el designio creador de Dios encuentran las personas una plenitud profunda y duradera", en un artículo en el Wall Street Journal, en el que se dirigió también a los homosexuales.
"Para los no casados, sean cuales sean sus atracciones, la castidad exige abstenerse del sexo. Jesús nos pide esta virtud porque hizo nuestros corazones para la pureza, del mismo modo que hizo nuestras mentes para la verdad. Con la gracia de Dios y nuestra perseverancia, la castidad no solo es posible, sino que será también la fuerte de una auténtica libertad. La promiscuidad es la causa de tanto sufrimiento innecesario, de corazones rotos, de soledad, y de tratar a los otros como un medio para la propia satisfacción sexual", indicó Sarah.
Sostuvo que "como madre, la Iglesia, intenta proteger a sus hijos del daño del pecado". "En su magisterio sobre la homosexualidad, la Iglesia orienta a sus fieles distinguiendo entre su identidad y sus atracciones y acciones. Las relaciones con el mismo sexo, que son gravemente pecaminosas y perjudiciales para el bien de quienes toman parte en ellas. Miembros de la comunidad LGBT merecen que se les diga esta verdad en caridad, especialmente por parte del clero que habla en nombre de la Iglesia", afirmó.