Obispo castrense pide evitar «enfrentamientos estériles» tras confirmarse explosión en el submarino argentino perdido

El obispo castrense de Argentina, Santiago Olivera, aseguró que "debemos ser capaces de contemplar y capitalizar el dolor de muchos", frente al sufrimiento de los familiares de los 44 tripulantes del submarino ARA San Juan. "La incertidumbre se instala en todos los argentinos ensombreciendo nuestros pensamientos y sentimientos. Recemos por nuestra Patria y sus instituciones. En estos momentos, necesitamos más que nunca la valentía de la fe. Tengamos confianza, el Señor es nuestra fortaleza", exhortó Olivera.

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: AICA.

"RESPETEMOS LA DIGNIDAD MÁS PROFUNDA DEL HERMANO".

El obispo castrense de Argentina, Santiago Olivera, pidió que "en esta situación tan dolorosa cuando se presenten los conflictos, respetemos la dignidad más profunda del hermano" y que no hayan "enfrentamientos estériles", tras confirmarse que hubo una explosión en la zona donde se reportó por última vez el submarino ARA San Juan, lo que generó el caos y dolor de los familiares de los 44 tripulantes en la base naval de Mar del Plata, el 23 de noviembre. 

"Junto a los capellanes, en este momento en que la incertidumbre se instala en todos los argentinos ensombreciendo nuestros pensamientos y sentimientos, nos sentimos llamados a anunciar que la omnipotencia de Dios se manifiesta en su misericordia: Dios nos mira siempre con amor, para cumplir en nosotros sus designios providentes. En estas circunstancias tan difíciles valoramos el afecto y cercanía de tantos y el gesto de la comunidad internacional que ha venido en nuestra ayuda, haciendo posible una verdadera cultura del encuentro", afirmó. 

El prelado aseguró que "debemos ser capaces de contemplar y capitalizar el dolor de muchos", y solicitó que en todas las Misas se rece por "nuestros 44 compatriotas del submarino ARA San Juan y por la fortaleza y consuelo de sus familias". "También recemos por nuestra Patria y sus instituciones. En estos momentos, necesitamos más que nunca la valentía de la fe. Tengamos confianza, el Señor es nuestra fortaleza", exhortó Olivera.