Periodista cubano Orlando Márquez: «Es necesario posibilitar mayores espacios de libertad»

La principal publicación católica de Cuba advirtió el pasado viernes que la ausencia de cambios políticos en la isla amenaza con hacer naufragar las reformas económicas emprendidas por el presidente Raúl Castro.

Autor: VenL. / Fuente: El nuevo Herald.

PARA EL "PROGRESO MATERIAL Y ESPIRITUAL DE LOS CIUDADANOS".

“Si consideraciones políticas… no son también actualizadas, pocas posibilidades tienen de triunfar las reformas económicas y sociales”, señaló la revista Palabra Nueva del arzobispado de La Habana, que encabeza el cardenal Jaime Ortega. “Es necesario posibilitar mayores espacios de libertad, toda la libertad que contribuya al progreso material y espiritual de los ciudadanos y de la nación. Estamos a tiempo”, precisó en un artículo de su director Orlando Márquez. “Aun la discriminatoria ley de inversión extranjera puede quedar a medias, y todo cuanto debe llevarnos a una situación de mayor prosperidad, independencia y soberanía económicas podría reducirse a palabras o letra impresa”, advirtió, en alusión a un ley dictada este año que ofrece ventajas a los capitales foráneos pero excluye las inversiones de cubanos que viven en la isla.

Desde que sustituyó a su hermano enfermo Fidel Castro en el 2006, Raúl puso en marcha reformas para 'actualizar' el agotado modelo económico de corte soviético, que fueron refrendadas por el VI Congreso del gobernante Partido Comunista (único) en el 2011. Bajo el liderazgo del cardenal Ortega, la Iglesia ha apoyado públicamente las reformas, aunque ha pedido más velocidad.

La revista recordó la ‘Perestroika' soviética de los años 80, “cuando algunos líderes del PCUS (el antiguo Partido Comunista de la Unión Soviética) se planteaban la necesidad de reformar la política económica y modernizar al país, se encontraron con el mismo dilema, pues los cambios económicos implicaban cambios políticos… Lograr el progreso y mantener en mínimo la brecha entre los que tienen más y los que tienen menos es un reto grande, pero creo que una gran dificultad puede estar en otro lugar: ¿cómo convencer que se debe cambiar lo que fue concebido para no ser cambiado jamás? Ciertamente es muy difícil”, escribió Márquez. “Quizás eso explique, o ayude a comprender, el lento avance de las reformas económicas en nuestro país. Hasta cierto punto, se comprende que haya motivos para proceder con cautela, si se mira la experiencia de la desaparecida Unión Soviética y todo el sistema socialista del Este de Europa”.