Caso Carmelitas de Nogoyá: «Es un grave antecedente que afecta directamente la libertad religiosa»

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: AICA.

"NO PODEMOS PERMITIR ESTE ATROPELLO".

El abogado especialista en Derecho Constitucional Nicolás Mayoraz aseveró que el allanamiento al monasterio de las Carmelitas Descalzas de la ciudad entrerriana de Nogoyá, por una denuncia periodística sobre supuestas torturas y privación ilegítima de la libertad de las religiosas, constituye "un caso evidente de falta de respeto a la libertad religiosa", y sostuvo que la queja al juez y al fiscal se produce debido a que "no lo pueden tratar como un delito común porque, además de no existir, cualquier investigación que deba hacerse, debe respetarse el Concordato, en consecuencia debe ser resuelto por la justicia federal", en una entrevista radial.

"Así es como se hizo un allanamiento con una espectacularidad cinematográfica, 50 policías de fuerzas especiales, con armas largas y encapuchados, ingresaron al convento a las seis de la mañana, cuando todavía no había amanecido, rompieron la puerta de ingreso, las de las celdas con la idea de buscar vaya a saber qué. Pensaban encontrarse con mujeres en situación de servidumbre o de tortura y se encontraron con una vida normal de un convento, con monjas que ya estaban rezando. A raíz de ese allanamiento con una velocidad que no se ha visto ni en un operativo antidroga, no encontraron casi nada, secuestraron sí algunos elementos usados por las monjas en algunas ocasiones para el tema de penitencias, algunos cilicios y nada más que eso", indicó el constitucionalista, que actuó como consultor técnico de los abogados penalistas de las religiosas.

Mayoraz aseguró que "la cuestión tiene que ver con el derecho canónico, que en definitiva debería analizarse la regla de las normas de las Carmelitas Descalzas, ya que ésta es una orden de clausura, les diría que es de las ordenes más estrictas que hay y de las más antiguas del mundo". "Exigimos que se respete la libertad religiosa, la libertad de las personas en elegir ese tipo de vida y fundamentalmente el planteo constitucional que aquí hay un concordato firmado entre la Argentina y la Santa Sede por el cual se le garantiza a la Iglesia la libertad de religión y la libertad de organizar el culto de modo que mejor lo considere conveniente. Lo importante es también unirnos, apoyar la libertad religiosa, como laicos, como civiles y como hombre de derecho, no podemos permitir este atropello, que a un monasterio se lo trate como si fuera un centro de detención clandestina", afirmó.