Cardenal Poli preside multitudinaria Misa en el santuario de San Cayetano de Buenos Aires

El arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, leyó la carta que envió Francisco días atrás en la que destacó que "una cosa es tener pan para comer en casa y otra es llevarlo como fruto del trabajo, y esto es lo que confiere dignidad". 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: AICA.

"PEDIMOS PAZ, PROGRESO Y JUSTICIA PARA TODOS".

El cardenal y arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, presidió la Misa central de la festividad de San Cayetano, en el santuario del barrio porteño de Liniers, a la que asistió una multitud de personas como todos los años, donde exhortó a conseguir "paz, progreso y justicia para todos" en el país y aconsejó practicar "la compasión y la misericordia" con el prójimo, el 7 de agosto.

Frente a los fieles que pidieron la intercesión de San Cayetano en búsqueda de pan y de trabajo, mientras que otros para agradecer al santo haberlos conseguido, el prelado leyó la carta que envió Francisco días atrás en la que destacó que "una cosa es tener pan para comer en casa y otra es llevarlo como fruto del trabajo, y esto es lo que confiere dignidad", y afirmó que "cuando pedimos trabajo para llevar el pan a casa, estamos pidiendo dignidad". 

Poli sostuvo que el "Acta de la Independencia alcanzará su plena vigencia cuando la familia más postergada tenga una casa digna para formar su hogar, donde no falte la educación, la salud y un trabajo digno y honrado para los padres". "Ustedes saben. No se confundan. Una foto o un encuentro con el Papa no te hace su vocero, su amigo ni su misionero si no practicamos los mandamientos de la compasión y la misericordia con el otro, que no es mi enemigo, sino mi hermano, mi semejante, mi prójimo", al referirse a quienes piden audiencias con el Papa.