Cardenal de Francia preside Misa por Jacques Hamel, el sacerdote degollado por el Estado Islámico

El arzobispo de París, Andre Vingt-Trois, pidió a los franceses que no pierdan el sentido de su fe, dado que "no nos podemos dejar llevar por el juego político del Estado Islámico que quiere enfrentarnos a unos con otros". Asistieron el presidente François Hollande, sus ministros, ex presidentes, y toda la clase política del país, junto a más de 1.500 fieles que consiguieron atravesar los severos controles de seguridad.

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Clarín.

EN UNA CATEDRAL DE NOTRE DAME BLINDADA.

El cardenal y arzobispo de París, Andre Vingt-Trois, presidió una Misa, el 27 de julio, en la Catedral de Notre Dame por Jacques Hamel, el sacerdote de 85 años asesinado por dos militantes del Estado Islámico que interrumpieron en la celebración eucarística al grito de "Alá es grande" en la iglesia de Saint Etienne du Rouvray, ubicada al noroeste de la capital francesa.

El prelado pidió que eviten la tentación de la venganza y que no pierdan el sentido de su fe, dado que "no nos podemos dejar llevar por el juego político del Estado Islámico que quiere enfrentarnos a unos con otros". Estuvieron presentes el presidente François Hollande, sus ministros, ex presidentes, y toda la clase política del país, junto a más de 1.500 fieles que consiguieron atravesar los severos controles de seguridad.

La catedral estaba blindada, con soldados armados que rodeaban Notre Dame, su entrada y la plaza, frente al temor de otro atentado. Líderes espirituales de distintos credos pidieron a Hollande reforzar la seguridad en los lugares de culto. El arzobispo de Ruán, Dominique Lebrun, de cuya diócesis dependía Hamel, rindió un homenaje al Padre Jacques y rezó por sus asesinos. "Padre, recuerda a Jacques, que fue llamado después de vos. Nosotros osamos rezar por los asesinos del Padre Jacques. Si tú lo quieres, sálvalos", pidió Lebrun.