Cardenal Ezzati: «Matemos el odio antes que el odio mate el alma de Chile»

El arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, afirmó que "podrán querer destruir, con toda la crueldad que son capaces, imágenes materiales, sin embargo, no sólo la fe, sino también la historia dan testimonio que Jesús sigue vivo y presente en la historia personal y comunitaria". 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Conferencia Episcopal de Chile.

EN MISA DE DESAGRAVIO EN LA IGLESIA DE LA GRATITUD NACIONAL.

El cardenal y arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, aseguró que "ante el surgimiento de no pocos actos de violencia, he recordado un dicho de mi predecesor, el Cardenal Raúl Silva, pronunciado en un momento particularmente trágico de nuestra historia: 'matemos el odio antes que el odio mate el alma de Chile'", al presidir la Misa de desagravio en la iglesia de la Gratitud Nacional a la que asistieron miles de fieles, el 11 de junio pasado, luego de que encapuchados robaron y destruyeron la imagen de Cristo crucificado, al finalizar una movilización estudiantil por las calles principales de la capital del país trasandino. 

"La súplica de Jesús en la cruz, es también la súplica de la Iglesia, de esta Iglesia de Santiago, de esta Parroquia María Auxiliadora, de esta obra educativo-pastoral de la Gratitud Nacional: 'Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen'. Lamentamos que el deseo honesto de muchos jóvenes haya terminado en el atropello a otros derechos, consagrados por la tradición democrática de nuestro país, por sus leyes y por el deseo de la inmensa mayoría, que, aún no creyendo en Jesucristo, anhela vivir en paz, respeto mutuo, sana y fraterna convivencia. Nada se construye con la enemistad, con las pasiones irracionales que sólo alimentan división y violencia. La paz es fruto de la justicia, una justicia verdadera que no nos pone uno frente al otro como enemigos", aseveró Ezzati. 

El prelado afirmó que "podrán querer destruir, con toda la crueldad que son capaces, imágenes materiales, sin embargo, no sólo la fe, sino también la historia dan testimonio que Jesús sigue vivo y presente en la historia personal y comunitaria, abriendo para todos, los tesoros infinitos de su amor también a los hombres y mujeres de hoy". Por su parte, el Provincial de los Salesianos en Chile, Alberto Lorenzelli. quien concelebró la celebración eucarística, agradeció "de manera muy especial los numerosos signos de solidaridad y de unión fraterna, expresión de la vida de la fe del pueblo cristiano que se une hoy a lo largo del País, y también las muestras de solidaridad que llegan de todas partes del mundo, de tantos que no pudiendo estar, se hacen presente desde el corazón y su oración". Al finalizar la Misa, cientos de fieles se congregaron frente a la puerta violentada y encendieron velas en medio de oraciones y cantos.