Obispo de Nigeria afirma que «más de 1.300.000 de cristianos fueron obligados a huir del norte» del país
El obispo de Kafanchan, Joseph Bagobiri, indicó que "11.500 cristianos fueron asesinados y 13.000 iglesias fueron destruidas o abandonadas", y pidió a la comunidad internacional que presione a las autoridades de Nigeria para que resuelvan la emergencia humanitaria de la población desplazada y que garanticen la libertad de culto a los cristianos y otras minorías en el norte del país.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Fides.
PADECEN VIOLENCIA DE ISLAMISTAS DE BOKO HARAM Y LOS PASTORES FULANI.
El obispo de Kafanchan, Joseph Bagobiri, afirmó que en el norte de Nigeria "entre 2006 y 2014, unos 11.500 cristianos fueron asesinados, otros 1.300.000 se vieron obligados a desplazarse y 13.000 iglesias fueron destruidas o abandonadas", en su informe titulado 'El impacto de la violencia persistente contra la Iglesia en el norte de Nigeria', durante en una conferencia en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York.
El prelado pidió a la comunidad internacional que presione a las autoridades de Nigeria para que resuelvan la emergencia humanitaria de la población desplazada y que garanticen la libertad de culto a los cristianos y otras minorías en el norte del país. Aseveró que las comunidades más afectadas por la violencia de Boko Haram son las de los estados del norte de Adamawa, Borno, Kano y Yobe. Asimismo, aseguró que durante los últimos meses, estas áreas fueron agredidas por los islamistas llamados pastores Fulani.
"La comunidad cristiana en los estados de mayoría cristiana del llamado Middle Belt -Plateau, Nassarawa, Benue, Taraba y la parte sur de Kaduna- son las más afectadas por los ataques y las invasiones de los pastores Fulani musulmanes. Se trata de una flagrante invasión extranjera de las tierras ancestrales de los cristianos y de otras comunidades minoritarias. En esas zonas, los pastores Fulani aterrorizan sin cesar a las comunidades, borrando algunas de ellas del mapa, y en lugares como Agatu en el Estado de Benue y Gwantu y Manchok y en el de Kaduna, estos ataques han adquirido un carácter de genocidio, con 150-300 personas asesinadas en una noche", indicó Bagobiri.