Desconocidos armados atentan contra el cardenal nigeriano Onaiyekan

El cardenal y arzobispo de Abuja, John Onaiyekan, fue víctima de un atentado cuando 3 hombres armados aún no identifidos intentaron asesinarlo, mientras se desplazaba en su automóvil de Benin a Uromi. "Gracias a Dios el cardenal Onaiyekan sobrevivió el ataque de algunos elementos criminales; si algo le hubiera sucedido, ¿cuál sería la historia?", afirmó el arzobispo de Benin, Eugène Cyrille Houndékon. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Gaudium Press.

BALEARON EL AUTO PERO ÉL Y EL CHOFER QUEDARON ILESOS.

El cardenal y arzobispo de Abuja, John Onaiyekan, fue víctima de un atentado cuando 3 hombres armados aún no identifidos intentaron asesinarlo, mientras se desplazaba en su automóvil de Benin a Uromi, el 29 de abril pasado. El prelado nigeriano, que junto a su chofer quedaron ileso a pesar de los daños ocasionados por las balas al vehículo, no realizó ninguna declaración oficial sobre el lamentable ataque que padeció.

"Gracias a Dios el cardenal Onaiyekan sobrevivió el ataque de algunos elementos criminales; si algo le hubiera sucedido, ¿cuál sería la historia? El hecho es una oportunidad para hacer un llamado al presidente para que provea una seguridad a las personas del estado de Edo. La seguridad es una de las exigencias mínimas para una sociedad. Si no hay seguridad para la vida y la propiedad, no será posible ningún tipo de inversión o desarrollo", afirmó el arzobispo de Benin, Eugène Cyrille Houndékon. 

Por su parte, el conductor del vehículo en el que se trasladaba el cardenal afirmó que "el atentado fue dispuesto aprovechando un bache de la carretera que obligó al vehículo a disminuir la velocidad". "En ese momento tres hombres armados salieron de una plantación y abrieron fuego desde varios ángulos. Me vi obligado a dar marcha atrás evitando con violencia a otros coches que estaban en nuestro mismo camino. Fue entonces cuando nos dimos cuenta de que las balas habían destrozado el cristal de la ventanilla del pasajero, a la izquierda, dejando demasiados agujeros en la puerta, gracias a Dios, tanto el Cardenal como yo salimos ilesos", sostuvo.