Francisco acepta el retiro del cardenal cubano Jaime Ortega después de 4 años

El arzobispo emérito de La Habana, Jaime Ortega, que estuvo al frente de la Arquidiócesis de la capital cubana por casi 35 años, será reemplazado por el arzobispo de Camagüey, Juan de la Caridad García, quien elogió la labor de su antecesor a favor de la Iglesia y el pueblo de Cuba, que se encuentra bajo el gobierno comunista desde hace 5 décadas.

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Infobae.

SEGÚN EL DERECHO CANÓNICO DEBEN RENUNCIAR A LOS 75.

Francisco aceptó el retiro del cardenal y ahora arzobispo emérito de La Habana, Jaime Ortega, el 26 de abril pasado, luego de 4 años de que éste presentó su renuncia al cumplir 75 años, tal como lo establece el Código de Derecho Canónico. El arzobispo de Camagüey, Juan de la Caridad García, fue designado por el Papa para sustituirlo en la Arquidiócesis de La Habana.

"Vamos a tratar de continuar la obra que Ortega ha realizado y estoy seguro, me lo ha confirmado así, de su apoyo, su oración y su compañía. Destacaría todo lo que él ha hecho a favor de la Iglesia y a favor del pueblo cubano, así como toda su labor misionera, catequética, educativa y caritativa", sostuvo García, quien elogió la labor de su antecesor a favor de la Iglesia y el pueblo de Cuba, que se encuentra bajo el gobierno comunista desde hace 5 décadas. 

Ortega, de 79 años, fue arzobispo de La Habana casi 35 años, desde noviembre de 1981 y desempeñó un relevante papel al frente de la Iglesia católica en Cuba, en un período en que la isla recibió la visita de san Juan Pablo II en 1998, Benedicto XVI en 2012 y Francisco en 2015. El prelado emérito propició como mediador frente al régimen de Raúl Castro un proceso de excarcelación de presos políticos que culminó en 2011. También tuvo un importante rol en los contactos que dieron paso al deshielo entre Cuba con Estados Unidos.