El Jubileo de la Misericordia no atrae la cantidad de peregrinos esperada
Con respecto a diciembre de 2014, la cantidad de fieles presentes en los diferentes encuentros con el Papa (audiencias de los miércoles, Misas y el Angelus de los domingos), cayó casi un 30%, pasando de 461.000 personas a 324.000. En 2000, durante el anterior Jubileo, casi 150 peregrinos por minuto atravesaron la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro.
Autor: VenL. / Fuente: La Nación.
30% MENOS VISITANTES QUE EL AÑO ANTERIOR.
Durante 2015, más de 3,2 millones de feligreses participaron en los actos presididos por el Papa en el Vaticano, una cifra notablemente inferior a los 5,9 millones que asistieron a las ceremonias de Francisco en 2014. El Jubileo de la Misericordia no atrae la cantidad de peregrinos esperada y la prensa local habla incluso de fracaso, aunque comerciantes y voluntarios son optimistas. La gran 'Via della Conciliazione', que va del castillo de Sant'Angelo a la Plaza San Pedro, por donde todos los peregrinos están obligados a pasar, no tuvo mucha concurrencia ni siquiera durante las fiestas de fin de año.
"Se ve la misma gente que en el mismo período del año pasado; ni más ni menos", señaló un vendedor de souvenirs cuyo puesto está cubierto de minicoliseos de plástico "hechos en China". Pero, ajustándose la gorra, añadió: "Está claro que no es la locura que nos anunciaban", es decir, 10 millones de personas, según las autoridades italianas. Un cálculo que confirman las cifras de asistencia al Vaticano publicadas por la Prefectura de la Casa Pontificia.
Con respecto a diciembre de 2014, la cantidad de fieles presentes en los diferentes encuentros con el Papa (audiencias de los miércoles, las misas y el Angelus de los domingos) cayó casi un 30%, pasando de más de 461.000 personas a 324.000. En 2000, durante el anterior Jubileo, casi 150 peregrinos por minuto atravesaron la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro y más de 32 millones de turistas peregrinos visitaron la Ciudad Eterna. "Sin efecto Jubileo", tituló el diario italiano 'La Repubblica'. Según la Federación de Hosteleros y Restauradores de Roma, la tasa de ocupación de los hoteles en fin de año sólo fue del 70%, frente al 90% en el mismo período de 2014.
Otra de las razones de la desafección de los peregrinos en Roma tiene que ver con el matiz 'local' que ha querido otorgar Francisco a este Jubileo, de puertas santas abiertas en todo el mundo. Lo más importante para Jorge Bergoglio, según dijo en Radio Vaticano el arzobispo Angelo Becciu, no es la afluencia, sino "el hecho de que cada uno pueda tener la posibilidad de experimentar la bondad, el amor y la misericordia de Dios".
Cerca del castillo de Sant'Angelo, en una pequeña carpa blanca, abierta de par en par, voluntarios vestidos de amarillo recorren las calles esperando a aquellos que deseen atravesar la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro. En el centro de recepción de peregrinos, indicado discretamente en el número 7 de una avenida vaticana, se pueden reservar plazas para las audiencias de los miércoles y para los "grandes acontecimientos" previstos durante el Año Santo, o se puede recoger un "pergamino" que acredita la participación en la peregrinación.
"No tenemos cifras del número de personas que llegan por día, pero la afluencia de peregrinos es constante", constató Massimiliano, el responsable del centro. Al ser consultado sobre la escasa publicidad en las calles de Roma sobre el Año Santo, al contrario que en 2000, Massimiliano consideró que ese lado "poco ostentoso responde a la discreción mostrada por el papa Francisco".