Cardenal Maradiaga: «El plan de Dios es una familia unida para poder vivir, crecer y madurar felices»

El cardenal y arzobispo de Tegucigalpa, Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, aseveró que si Honduras quiere cambiar y progresar, debe "cultivar a las familias como Dios manda". "Cuando Dios falta en una familia, la familia no puede mantenerse unida; Dios no quiere familias desintegradas", sostuvo el prelado. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: La Prensa Honduras.

EN LA SOLEMNIDAD DE LA SAGRADA FAMILIA.

El cardenal hondureño y arzobispo de Tegucigalpa, Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, afirmó que "el plan de Dios es una familia unida para poder vivir, crecer y madurar felices", en la Solemnidad de la Sagrada Familia, durante su homilía dominical, al destacar que si Honduras quiere cambiar y progresar, debe "cultivar a las familias como Dios manda". 

El prelado destacó la importancia de la familia en la vida de las personas, en el desarrollo y el progreso de la sociedad y del Estado. "La familia no puede ser un desierto, debe ser un jardín en el que se cultiven las virtudes y se pueda crecer en el amor. La familia es el proyecto más importante en la vida de toda persona", sostuvo. Invitó a no mirar el sacramento del matrimonio simplemente como una ceremonia, sino como un "Cristo Resucitado". Pidió imitar a José y María como educadores de Jesús en el amor y la libertad.

"Jesús creció y aprendió a caminar por la vida en el seno de una familia con el amor de sus padres. Jóvenes que toman caminos equivocados en maras o en drogas o en cualquier otro problema, muchas veces ellos crecieron sin familias y en la calle no se puede aprender a amar y servir. Cuando Dios falta en una familia, la familia no puede mantenerse unida; Dios no quiere familias desintegradas", aseveró Rodríguez Maradiaga.