Varios ayuntamientos de Francia luchan por poner los tradicionales pesebres
Varios ayuntamientos franceses luchan por poner los tradicionales pesebres, tras el informe de la Asociación de Alcaldes de Francia en el que aconsejó que no se los coloquen en las alcaldías del país para "fortalecer los valores republicanos", tras los ataques yihadistas en París. El alcalde de la localidad francesa de Béziers, Robert Ménard, ganó una batalla en los tribunales para poder instalar el pesebre en su alcaldía.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Religión en Libertad.
"FRANCIA TIENE UNA CULTURA CRISTIANA".
Alcalde de Béziers junto al belén del Ayuntamiento en 2014.
Varios ayuntamientos franceses luchan por poner los tradicionales pesebres, tras el informe de la Asociación de Alcaldes de Francia (AMF) en el que aconsejó que no se los coloquen en las alcaldías del país para "fortalecer los valores republicanos", tras los ataques yihadistas en París. La tradición del Belén se vivió siempre de modo pacífico en el país, pese a la ley laicista de 1905 que prohibe la presencia de símbolos religiosos en "edificios públicos y monumentos, fuera de los lugares reservados al culto, los cementerios y los museos".
El alcalde de la localidad francesa de Béziers, Robert Ménard, fue el encargado de dirigir la rebelión contra la AMF, que representa a unos 36.000 alcaldes y presidentes de departamentos. Ménard ganó una batalla en los tribunales para poder instalar el pesebre en su alcaldía, con el argumento de que no está en juego un símbolo religioso sino una tradición francesa, hoy más importante de preservar que nunca. Afirmó que pese a que no es religioso, considera que el belén es una tradición cultural "porque Francia tiene una cultura cristiana".
El consejo departamental de La Vendée ganó su caso en los tribunales, pero la alcaldía de Melun, cerca de París, fue obligada por un tribunal administrativo de apelación a no instalarlo, después de que esa instancia considerara el pesebre como "símbolo religioso" y no como "decoración navideña". "Pondremos un cartel en el lugar donde iba a instalarse el nacimiento, explicando por qué no está y nuestra oposición a esa decisión de la Justicia", aseguró un portavoz del Ayuntamiento de Melun.