Arzobispo de Pamplona presenta querella criminal contra exposición blasfema

El arzobispo de Pamplona, España, Francisco Pérez, repudió la exposición blasfema de Abel Azcona, quien habría utilizado 242 hostias consagradas, supuestamente robadas en iglesias de Navarra y Madrid, para formar en el piso la palabra 'pederastia'. "Ha depreciado, devaluado y ridiculizado la Eucaristía, presencia real de Jesucristo en la sagrada forma y lo más sagrado para un católico. Tenemos derecho de acudir a la justicia civil ante un acto tan sacrílego que lesiona y ridiculiza nuestro modo de vida", aseveró. 

Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: InfoCatólica.

CELEBRARÁ 2 MISAS DE DESAGRAVIO.

El arzobispo de Pamplona, España, Francisco Pérez, presentó una querella criminal contra la exposición blasfema de Abel Azcona, quien habría utilizado 242 hostias consagradas, supuestamente robadas en distintas iglesias de Navarra y Madrid, para formar en el piso la palabra 'pederastia', en una Sala de Exposiciones de la plaza Serapio Esparza en la ciudad, un local propiedad del Arzobispado que en los años 90 fue cedido al Ayuntamiento de Pamplona.

"Es un sacrilegio blasfemo. Ha depreciado, devaluado y ridiculizado la Eucaristía, que es la presencia real de Jesucristo en la sagrada forma y lo más sagrado para un católico. Tenemos derecho de acudir a la justicia civil ante un acto tan sacrílego que lesiona y ridiculiza nuestro modo de vida", aseveró el prelado, quien convocó para el 25 de noviembre dos Misas de desagravio simultáneas a las 19. Una será en la catedral de Pamplona, y será presidida por el propio arzobispo, y la otra en la catedral de Tudela, que la celebrará el obispo auxiliar, Juan Antonio Aznárez Cobo. Pérez calificó de "acto delictivo" la exposición blasfema, dado que "hiere los sentimientos profundos de los creyentes". Es por ello, que también envió una carta al Ayuntamiento de Pamplona para que retiren la exposición con connotaciones sacrílegas que van en contra de los católicos. 

Asimismo, indicó que el Arzobispado revisa actualmente el acuerdo de cesión de la Sala donde se realiza la exposición, puesto que se establecía que "debía ser un centro cultural y que no debía albergar exposiciones o manifestaciones que mancharan o desdijeran de un ámbito que siempre había sido religioso". Por otro lado, las formas consagradas ya no se encuentran en el piso, dado que alguien consideró oportuno llevar la reserva del Santísimo a una parroquia