La Legislatura porteña declara de interés cultural un musical sobre San Maximiliano Kolbe
La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires declaró de interés cultural un musical dedicado a San Maximiliano Kolbe, que retrata su vida y las historias de quienes padecieron el holocausto. Kolbe fue un sacerdote franciscano polaco asesinado por los nazis en el campo de concentración de Aushwitz en 1941, tras entregar voluntariamente su vida a cambio de la un padre de familia que fue condenado a morir de hambre.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Diario del Peregrino.
'KOLBE, SÓLO EL AMOR CREA'.
La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires declaró de interés cultural 'Kolbe, sólo el amor crea', un musical dedicado a San Maximiliano Kolbe, que retrata su vida y las historias de quienes padecieron el holocausto. La obra cuenta con libro y dirección a cargo de Carlos Abregú, con coordinación general de Buenos Aires para una Nueva Evangelización (Banuev) y música original de Ángel Mahler.
Mahler reflexionó que "Kolbe es la luz que nos va permitir seguir creyendo en la humanidad". "Es muy emotivo para nosotros este reconocimiento porque es de alguna manera una señal en nuestro camino que nos da la certeza de que a través del arte podemos aportar valores, reflexión y una renovada esperanza en un mundo más amistoso y fraterno", afirmó Abregú, libretista y director del musical. En la ceremonia de entrega de la distinción, a cargo de la diputada Victoria Morales Gorleri, estuvieron presentes los obispos auxiliares de Buenos Aires, Enrique Eguía Seguí y Alejandro Giorgi; el sacerdote y rector de la Misión Polaca Católica en Argentina, Jorge Twarog; el rabino y líder espiritual de la Congregación Israelita de Argentina Simon Moguilevsky.
San Maximiliano Kolbe fue un sacerdote franciscano polaco asesinado por los nazis en el campo de concentración de Aushwitz en 1941, tras entregar voluntariamente su vida a cambio de la un padre de familia que fue condenado a morir de hambre. "Soy sacerdote católico polaco; soy anciano; quiero tomar su lugar, porque él tiene esposa e hijos", sostuvo el santo que se ofreció a cumplir la tortura que le impusieron al hombre. Kolbe murió de inanición en su celda, que actualmente es un lugar de peregrinación, y su ejemplar sacrificio se divulgó por todo el mundo. Fue beatificado por Pablo VI en 1971 y canonizado por Juan Pablo II en 1982.