Obispos de Chile reiteran rechazo de la Iglesia al aborto en Comisión de Salud de la Cámara
El vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Chile (CECH), Alejandro Goic, sostuvo que al promover la vida humana, la Iglesia rechaza "el aborto y las desigualdades sociales, la pena de muerte y la usura, la eutanasia y la discriminación". Por su parte, el arzobispo de Concepción, Fernando Chomali, aseguró que en los casos en que estaría en riesgo la vida de la madre "el dilema no es entre la vida del hijo y la vida de la madre, ¿Cómo se va a despenalizar algo que no está penalizado?".
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: Conferencia Episcopal de Chile.
"EL ABORTO NO SOLUCIONA NADA".
El arzobispo de Concepción, Fernando Chomali.
El obispo de Rancagua y vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Chile (CECH), Alejandro Goic, y el arzobispo de Concepción, Fernando Chomali, reiteraron el rechazo de la Iglesia al aborto en la comisión de Salud de la Cámara de Diputados, donde se discute el proyecto que pretende despenalizar el asesinato de bebés en tres causales, el 21 de julio pasado.
Goic afirmó que al promover la vida humana, la Iglesia rechaza "el aborto y las desigualdades sociales, la pena de muerte y la usura, la eutanasia y la discriminación", dado que su opción es "pro-vida, no solamente pro-parto". "No somos ni lobistas ni agentes de presión. Hablamos como representantes de una institución, la Iglesia Católica, que sirve a Chile, que ama a Chile y que hoy, como ayer, busca su mayor bien, especialmente de los más pobres, sencillos y sufrientes. A quienes ayer nos desterraban a las sacristías por defender los derechos humanos y hoy se oponen al aborto, les invitamos a promover la vida y la dignidad humana siempre y en cualquier circunstancia. La Iglesia está preocupada por dos personas, no solo por una: la persona de la mujer que vive la situación límite de enfrentarse a la posibilidad de un aborto; y la persona del hijo o de la hija que está por nacer", aseveró el vicepresidente de la CECH.
Asimismo, Chomali aseguró que en los casos en que estaría en riesgo la vida de la madre "el dilema no es entre la vida del hijo y la vida de la madre, ¿Cómo se va a despenalizar algo que no está penalizado?". "El aborto no soluciona nada, solo agrava el dolor de un desenlace que es la muerte. Pero morir no es lo mismo que eliminar. En caso de violación, nadie niega que es un drama el caso de la mujer violentada. ¿Pero quién puede afirmar que la vida del fruto de esa concepción no merece ser vivida? Yo no soy capaz de afirmar eso", argumentó el prelado.