Evo regala a Francisco una combinación del crucifijo con el símbolo del comunismo
El Cristo crucificado sobre una hoz y un martillo, símbolo del comunismo, una ideología genocida bajo la cual millones de cristianos fueron asesinados y otros perseguidos, y aún siguen siéndolo en algunos países comunistas, fue rechazado por muchos fieles en todo el mundo, que acusaron al presidente boliviano de intentar politizar la visita de Francisco.
Autor: Jennifer Almendras. / Fuente: ACI Prensa.
DURANTE EL PRIMER DÍA DEL PAPA EN BOLIVIA.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, regaló a Francisco un Cristo crucificado sobre una hoz y un martillo, símbolo del comunismo, en una reunión el 8 de julio pasado, durante el primer día del Papa en el país. Pese a los problemas de audio de las únicas imágenes en video que fueron transmitidas del encuentro que no permiten entender toda la justificación de Morales, es evidente que el Pontífice quedó perplejo cuando el presidente andino le entregó en sus manos el inusual regalo.
Para algunos el Papa dijo "No está bien eso" y para otros "No sabía esto", ante la explicación de Morales que parece describir el obsequio como una réplica de una talla que hizo en los años 70 el sacerdote jesuita español Luis Espinal Camps, asesinado en 1980 por la dictadura, y por quien Francisco rezó en el camino que lo condujo del aeropuerto de El Alto hasta La Paz. La combinación del crucifijo con el símbolo del comunismo, una ideología genocida bajo la cual millones de cristianos en el mundo fueron asesinados y otros perseguidos, y aún siguen siéndolo en algunos países comunistas, fue rechazado por muchos fieles en todo el mundo, que acusaron al presidente boliviano de intentar politizar la visita de Francisco y considerarlo ofensivo a las numerosas víctimas de los grupos terroristas en Hispanoamérica y de los regímenes totalitarios comunistas.
Luego de la reunión privada con Morales y el intercambio de regalos, Francisco se desplazó hasta la Catedral, donde mantuvo un encuentro con las autoridades. "La fe es una luz que no encandila, las ideologías encandilan, la fe no encandila, la fe es una luz que no obnubila, sino que alumbra y guía con respeto la conciencia y la historia de cada persona y de cada convivencia humana", sostuvo el Papa en su discurso. El vocero del Vaticano, Federico Lombardi, confirmó que Francisco no sabía que el mandatario le iba a regalar un Cristo sobre la hoz y el martillo tallado en madera y desconocía su existencia.